La despoblación y el envejecimiento hacen peligrar 39 pueblos bercianos
El Bierzo Oeste concentra el mayor número de localidades con menos de 10 habitantes.
m.c.cachafeiro | ponferrada
Al menos 39 núcleos de población del Bierzo están en una situación límite. Es decir, no superan los 10 habitantes con lo que, si se suma el envejecimiento de su población, el riesgo de desaparecer es alto a medio plazo, por no decir a corto plazo también.
Así lo constata un informe al que ha tenido acceso este periódico en el que se advierte que suponen ya el 11% de los pueblos del Bierzo, 14 más que en un estudio anterior elaborado en el año 1991 a partir de datos también de los padrones municipales.
Aunque hay pueblos repartidos por toda la comarca, lo cierto es que la mayoría se concentra en los municipios de Balboa, Barjas y Vega de Valcarce, en los que el porcentaje de población mayor de 65 años supera el 40% y el de menos de 16 no alcanza el 7%.
El informe hace esta radiografía con datos del Padrón del año 2016 y lo pone en comparación con el de 1991, punto de inflexión para la pérdida de población en el Bierzo rural. En este periodo, de hecho, se han perdido 9.639 habitantes que residían en 344 pueblos. Además, tres localidades quedaron abandonadas: Cruces, Hermide y La Treita. De los 344 núcleos estudiados, en 60 se mantiene su población inicial e incluso se incrementa, como es el caso de Pardamaza, Carracedelo de Compludo, Fonfría, Matavenero y Poibueno, Acebo o San Pedro de Paradela. En cambio, hay otros 77 que pierden más del 50% de su población, lo que es también un indicador del riesgo potencial de despoblación.
El Bierzo ha tenido históricamente adversidades naturales, como pueden ser valles encajados, comunicaciones difíciles por carretera..., lo que ha hecho que, según el estudio, se hayan localizado en la comarca hasta el 80% de los pueblos abandonados entre 1900 y 2010 en la provincia de León; el primero fue, en 1950, Castellanos, en el municipio de Berlanga del Bierzo, al que se sumó una década después Vilacha, en el municipio de Villafranca del Bierzo, si bien el mayor número de pueblos abandonados se produjo entre 1970 y 1971 por el efecto de la emigración.
Esa despoblación ha ido acompañada de una concentración de la población en las últimas décadas en torno a Ponferrada, Cacabelos y Camponaraya frente al declive de las zonas mineras como Bembibre y Fabero.