La Casa de la Cultura expone 60 retratos escolares de entre 1939 y 1975

Era una costumbre en los años del franquismo. Llegaba el día en que por la escuela aparecía el fotógrafo y retrataba a los escolares vestidos de domingo, con el mapa de la península de fondo. Como en las fotografías de la Primera Comunión la rapacería entraba así en la vida civil del país.

Una selección de 60 retratos escolares tomados entre 1939 y 1975 en colegios de Ponferrada componen la muestra que puede visitarse hasta el próximo 27 de septiembre en la Casa de la Cultura de la ciudad. A modo de documento de identidad, las imágenes revelan los cambios en la fisonomía de los jóvenes estudiantes, su psicología, y la seriedad con la que, por lo general, se tomaban el trámite de dejarse fotografiar en la escuela, especialmente en los primeros años.

Porque pasado el tiempo, la función de documento oficial fue poco a poco desapareciendo, cambiaron los decorados y comenzaron a aparecer objetos de lo más diverso sobre la mesa. Con la popularización de las cámaras fotográficas, la costumbre de entregar la foto sobre una cartulina con datos del menor entró en desuso. Magín y Fariñas fueron dos de los fotógrafos de Ponferrada que realizaron retratos.