«Los terrenos serán restituidos a su condición original»
Los aspectos medio ambientales son «claves» para Naturgy en la operación de desmantelamiento de la central térmica de Anllares. Al menos así lo han puesto de relieve fuentes de la empresa, que han asegurado que, una vez que termine el proceso de desarme, se centrarán en los terrenos para recuperar su condición original.
«Los terrenos serán restituidos a su condición original mediante un ambicioso plan de restauración ecológica», garantizaron desde la compañía energética, haciendo hincapié en la ubicación de la térmica en un área de la Red Natura 2000, una red ecológica europea de áreas de conservación de la biodiversidad cuya finalidad es asegurar la supervivencia a largo plazo de las especies y los tipos de hábitat.
La cara más verde del desmantelamiento de la central de Anllares se perfilará también mediante el «fomento de la reutilización y el reciclaje, minimizando la generación de residuos», según explicaron desde Naturgy, quienes recordaron que, precisamente, es la nueva normativa ambiental la que está detrás del fin de Anllares. Eso y las inversiones necesarias. «El cierre se enmarca dentro de un nuevo contexto regulatorio medioambientalmente más exigente y eficiente, en el cual es obligatorio afrontar nuevas inversiones para que las plantas puedan continuar funcionando más allá de 2020. Además, los actuales precios de mercado, el mayor coste del precio del CO2 y las tasas medioambientales han agravado la viabilidad económica de estas plantas», resumieron fuentes de Naturgy.