La exportación de pizarra sube un 3% y el sector pide un plan especial

El sector de la pizarra, que da empleo a 1.400 trabajadores en el Bierzo y La Cabrera, cerrará el año con una «aceptable» subida del volumen de sus exportaciones en un tres por ciento, lo que supondrá, de acuerdo con las proyecciones de la patronal, alcanzar las 470.000 toneladas de pizarra vendidas y una facturación de 261 millones de euros, según adelantó ayer el presidente de la Asociación de Pizarristas de Castilla y León, Eliseo López.

Y el año será solo «aceptable» a pesar de la subida, porque el anterior ejercicio de 2018 fue «un año malo» y el sector todavía está lejos de recuperar la barrera del medio millón de toneladas que exportaba en la década pasada, antes del comienzo de la crisis económica. «El año pasado terminamos con muchas unidades en stock y es positivo haberles dado salida este para compensar», explicó el presidente de Apical. La subida del precio de la pizarra en un 1,9 por ciento también ha sido otra buena noticia.

Cerradas las explotaciones de carbón, López insistió ayer en proponer a la Junta de Castilla y León que elabore un Plan Especial para el sector de la pizarra, convertido en el último pilar de la minería en la provincia. «Estamos absorbiendo el excedente de mano de obra del carbón, y estamos contribuyendo a fijar población en las zonas rurales del Bierzo, de Zamora y de Valdeorras. Si no existiera la pizarra habría lugares donde el abandono sería significativo», afirma López.

A la espera de la respuesta de la Junta, el presidente de Apical explicó que el plan que proponen debería incluir líneas de ayudas para avanzar en la automatización de las explotaciones —«queremos, tener naves 4.0», dice López— algo que redundará en la seguridad, y en la mejora de las condiciones de trabajo en materia de prevención de riesgos y de enfermedades laborales. «Ahora estamos en pleno proceso de reducción del polvo de sílice en las explotaciones», añadió López. Pero el Plan Especial, ahora que la pizarra se ha quedado sola, también debería incluir ayudas a la exportación y mejo de las carreteras.

Convenio colectivo

López también avanzó que, a la espera de una nueva reunión el próximo lunes, la patronal cuenta con «un principio de acuerdo» en negociación del convenio de la pizarra para aplicar una subida del dos por ciento de salarios en cada año del trienio 2019-2021. Se trata de «una subida de recuperación del poder adquisitivo» de los trabajadores, después de años donde el sector se ha resentido.

CC.OO, sin embargo, desmintió en una nota que el acuerdo esté cerca. «De seguir así será el tercer convenio consecutivo que no firma», afirmó Felipe Fernández, que considera que las propuestas de la patronal «empeoran» la situación de los trabajadores, por ejemplo en los permisos retribuidos, porque se trata de «un convenio injusto e ineficaz para recuperar derechos perdidos». Los incrementos salariales «son ridículos» y CCOO también pide pasar de 1.826 horas anuales de jornada laboral a 1.800 horas.