El tripartito de Ponferrada aprueba la subida del recibo del agua y la recuperación de la tasa de basura

El pleno del Ayuntamiento de Ponferrada aprobó hoy la subida de un 9,70 por ciento en el recibo del agua y el establecimiento de una nueva tasa de basura, en sustitución de la eliminada a finales de los años 90, con los votos a favor de los tres grupos que conforman el tripartito que gobierna la ciudad -PSOE, Podemos y Coalición por el Bierzo (CB). La nueva tasa tendrá un coste de entre 36 y 48 euros al año por vivienda, mientras que la subida en el recibo del suministro de agua se traducirá en un aumento de unos tres euros al trimestre.

Durante el debate, el portavoz del PP, Marco Morala, consideró que “a las empresas concesionarias les va muy bien con el actual alcalde”. “Usted es un alcalde débil con las empresas concesionarias y su debilidad la pagaremos todos los ponferradinos”, le espetó al regidor, Olegario Ramón. La acusación enfadó al alcalde, que acusó a los 'populares' de poner en práctica un “ejercicio de fariseísmo” y de hacer “política de la mala” con un tema “tremendamente impopular”.

La adecuación de las tarifas del suministro y alcantarillado de agua abrió el fuego entre los grupos políticos. En nombre del PSOE, la portavoz del equipo de Gobierno, Mabel Fernández, aseguró que la decisión de aprobar estas nuevas tasas fue “difícil” pero forma parte de la “apuesta por transformar la ciudad”. “Nos vemos en la obligación de hacerlo ante los incumplimientos de equipos anteriores”, afirmó la portavoz municipal, que cifró en tres euros por trimestre el incremento del recibo. Según explicó Fernández, parte del aumento de los ingresos se destinará también a la renovación de las redes de abastecimiento y saneamiento, cuyo coste se cifra en 17 millones para sustituir los 62 kilómetros de red de fibrocemento existentes a día de hoy.

El portavoz del grupo Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala (D), junto al concejal de su grupo, Roberto Mendo (I), durante el pleno ordinario de esta mañana que debate la aprobación de una nueva tasa de basura y la subida del recibo del agua. CÉSAR SÁNCHEZ

Por parte de los socios de gobierno del tripartito, la portavoz de Podemos, Lorena Fernández, se remontó a 1996 para volver al momento en que se privatizó la gestión del agua por 25 años bajo el Gobierno municipal de Ismael Álvarez, un “contrato que dejó hipotecados a los ponferradinos”, lamentó la portavoz de la formación morada, que redobló su apuesta por remunicipalizar todos los servicios públicos dependientes del Consistorio. Igualmente, el portavoz de CB, Pedro Muñoz, señaló la existencia de informes técnicos y económicos que apuntan que la medida es “ineludible” si se quiere evitar el proceso contencioso con la empresa adjudicataria.

En cabeza de los grupos de la oposición, Morala calificó la subida de “insostenible” y criticó el “gasto desmedido” que supone. En la misma línea, la portavoz de Ciudadanos (Cs), Ruth Morales, consideró que se toma una solución “demasiado gravosa y desmesurada” y recordó al actual alcalde su responsabilidad como portavoz de la oposición durante el anterior mandato para forzar una “revisión paulatina” de la tasa.

También calificó de “desproporcionada” la subida el portavoz de USE Bierzo, Samuel Folgueral, que pidió a los responsables del Ayuntamiento que dialoguen con los grupos para alcanzar un acuerdo con la concesionaria. Por último, el portavoz del Partido Regionalista del Bierzo (PRB), Tarsicio Carballo, avanzó la posibilidad de llevar a cabo “acciones en contra” de una medida que, consideró, “no se puede asumir en una ciudad asolada por una crisis terrible y por el cierre de la minería”.

Tasa de basura

Por lo que respecta a la recuperación de la tasa de basura eliminada a finales de los años 90, el portavoz del PRB, Tarsicio Carballo, anunció la convocatoria de una manifestación de cara al 7 de enero para protestar por una medida que calificó de “inaceptable” y lamentó que la tasa vaya a repercutir “cifras astronómicas”, de entre 150 y 900 euros, a los comerciantes de la ciudad.

Además de la convocatoria de protesta por parte del PRB, los grupos de la oposición criticaron una medida que Folgueral calificó de “precipitada” o que Morales tildó de “total despropósito”. Morala reclamó “diálogo” a los responsables del Ayuntamiento y dudó de la obligatoriedad de implantar esa tasa.

El portavoz del grupo Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala, junto a las concejalas del grupo de Ciudadanos, Ruth Morales (C), y Teresa Magaz (I), durante el pleno ordinario de esta mañana que debate la aprobación de una nueva tasa de basura y la subida del recibo del agua. CÉSAR SÁNCHEZ

En nombre del equipo de Gobierno, la portavoz municipal aseguró que el tributo es común en el resto de ciudades y que se destinará a cubrir los costes presentes y futuros del servicio. Fernández insistió en el “compromiso claro” del Gobierno municipal para mejorar la recogida y tratamiento de residuos “a través de la gestión directa”. “Nos preocupa tener que hacerlo, pero tenemos que adoptar esta medida aunque sea impopular”, sentenció.

Desde los grupos que dan apoyo al PSOE, la portavoz de Podemos contradijo a Morala y recordó que la eliminación de esta tasa se “disfrazó” con una subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y que el impuesto se recupera para dar cumplimiento a una directiva europea “antes de que los tribunales nos enmienden la plana”. En la misma línea se pronunció Muñoz, que recordó que el plan de ajuste que afecta al Consistorio impide rebajar ese impuesto antes de 2022.

Contraprestación al TUP

Por otro lado, la sesión también dio luz verde al pago de 2,16 millones de euros más IVA a la empresa concesionaria del Transporte Urbano de Ponferrada (TUP), debido a que opera el servicio de forma alegal aunque el último contrato finalizó en 2012. El alcalde aseguró al término del debate que ha reiterado en numerosas ocasiones el sistema de gestión que prefiere, pero subrayó que el Ayuntamiento “no restará ningún derecho que le corresponda”.

El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, al acabar el pleno ordinario de esta mañana que debate la aprobación de una nueva tasa de basura y la subida del recibo del agua. CÉSAR SÁNCHEZ