Infraestructuras
Adif impulsa en Galicia un túnel como el Manzanal para mejorar el paso de trenes
El BOE publica las expropiaciones de Oural, con 1.804 metros, 800 más que el lazo del Bierzo
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La Secretaría General de Infraestructuras del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, anterior Ministerio de Fomento, ha sacado en el Boletín Oficial del Estado una resolución por la que da el primer paso para construir un nuevo túnel en la línea férrea de Monforte de Lemos a Lugo, dentro de los planes para impulsar la alta velocidad y el Corredor Atlántico de mercancías.
En concreto, publicó el pasado 11 de marzo las expropiaciones forzosas para construir una nueva infraestructura subterránea paralela al túnel de Oural, en los términos municipales lucenses de O Incio y Sarria. Ese túnel facilitará el trayecto desde Ponferrada a La Coruña y se da la circunstancia de que tiene 1.804 metros, casi 800 menos que el lazo del Manzanal que comunica el Bierzo con León, otra de las grandes infraestructuras ferroviarias pendientes del Corredor Atlántico.
El proyecto de Oural aprobado por Adif para la variante de Rubián contempla la construcción de ese nuevo túnel de 1.804 metros de largo que discurrirá paralelo al actual. Las obras incluirán, de acuerdo con los planes del administrador de infraestructuras ferroviarias, el acondicionamiento de tres galerías transversales de evacuación. El túnel actual se aprovechará como galería de emergencia.
En el municipio de O Incio está previsto expropiar algo más de 9.000 metros, en su totalidad propiedad de la Xunta de Galicia. Otros 5.000 metros serán ocupados con carácter temporal. En Sarria, rondan los 13.000 metros, en su práctica totalidad de particulares. Las ocupaciones temporales afectarán en este municipio a más de 10.000 metros.
Según publicó recientemente La Voz de Galicia , la construcción del actual túnel ferroviario de Oural, de unos dos kilómetros de longitud ahora, se dio por finalizada en 1882. Fue una de las grandes obras de ingeniería de su época, pero ha quedado obsoleto. Entre otras limitaciones, carece del gálibo necesario para el material rodante actual y plantea serias dificultades para adecuarlo a una línea electrificada.
Sobre el Manzanal, queda todo por hacer, aunque hubo un estudio para el Ave en 2003. De momento, busca financiación con cargo a fondos europeos.