La CHMS pide ayuda para frenar filtraciones de minas abandonadas

«Este es un problema que excede las capacidades de la Confederación». Así reconoció ayer el presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño Sil, (CHMS) José Antonio Quiroga, que el organismo dependiente del Ministerio de Transición Ecológica necesitará «ayuda de otras administraciones» como la Junta de Castilla y León y el propio Gobierno central para atajar las filtraciones procedentes de la antigua mina Alto Bierzo que contaminan el río Tremor desde el cierre de la explotación. En presencia del alcalde de Igüeña, Alider Presa, con el que firmó un convenio para invertir 260.000 euros en acondicionar la margen izquierda del río Quintana en la localidad de Quintana de Fuseros, Quiroga insistió en que la CHMS no ha dejado de abrir expedientes sancionadores contra la explotación, cuya titularidad actual no está muy clara según ha adviertido el propio Presa, pero frenar los vertidos contaminantes requiere de un plan ambicioso. «El problema tiene la escala suficiente como para que la administración autonómica y la central tomen cartas en el asunto», explicó al ser preguntado al término de la firma del convenio.

El alcalde de Igüeña, que en el pasado ha lamentado que la Junta de Castilla y León no haya invertido el millón de euros del aval de restauración de Alto Bierzo para solventar el problema, animó a usar las antiguas balsas de decantación de la mina abandonada para reducir los vertidos que contaminan el río con materiales pesados. Presa resaltó la contradicción que para Igüeña supone apostar por un modelo de turismo sostenible vinculado a la naturaleza mientras soporta que el río Tremor baje contaminado por las filtraciones de la mina. «No podemos avanzar en el turismo de medio ambiente cuando el valle entero está asfixiado por estos vertidos», se quejó el regidor.

Quiroga y Presa se reunieron en las oficinas de la CHMS en el pantano de Bárcena para firmar el convenio, largamente esperado por Igüeña, para acondicionar la orilla izquierda del río Quintana y abrir una nueva zona de baño en el municipio, esta vez en Quintana de Fuseros. La CHMS aportará el 80 por ciento de los 260.000 euros del presupuesto y el Ayuntamiento de Igüeña 52.000 euros.

Las obras comenzarán y estará terminadas a lo largo del próximo año y permitirán estabilizar los taludes del río y sustituir además un viejo colector que también causa vertidos contaminantes al río Quintana.

Presa valoró el buen funcionamiento que ha tenido la playa fluvial de Igüeña este verano de pandemia como elemento para generar actividad en el municipio y confía en que la nueva zona de baño de Quintana vaya en la misma línea. El alcalde recordó que Igüeña necesita más infraestructuras turísticas para resultar más atractivo como destino de naturaleza.