El candidato afirma que el programa electoral será el único «catecismo»

Carlos López Riesco pronunció ayer un discurso absolutamente continuista con la vista puesta en el año que resta hasta la convocatoria de los comicios municipales. En primer lugar señaló que el programa electora que fue concebido por Ismael Álvarez y el grupo de concejales que ahora continúa en el Ayuntamiento será el único «catecismo» hasta el final de legislatura. «Todas las actuaciones que se han puesto en marcha van a ser culminadas. Estamos aquí para mejorar las condiciones de vida en el Ayuntamiento de Ponferrada. No estamos para seguir escuchando una y otra vez las declaraciones de la portavoz del PSOE, que no se producen más que insultando», significó el candidato a la alcaldía. Futuro e ilusión López Riesco señaló que accederá al cargo con sentimientos contrapuestos. De un lado, triste porque «Ismael Álvarez a parte de ser un buen alcalde era también un buen compañero», pero ilusionado, porque, agregó: «Lo que debemos es seguir con su proyecto adelante. Ahora más que nunca vamos a ser un gran equipo para que Ponferrada siga avanzando». El sucesor declaró que sólo «quien no quiera ver» no se dará cuenta que Álvarez ha sido «un grandísimo alcalde de Ponferrada» y que ha llevado a la ciudad a una situación mucho mejor que hace siete años. Acerca de sus perspectivas de futuro político tras el año que resta de mandato, fue especialmente cauto: «Si algo te demuestran los acontecimientos es que no se pueden hacer planes de futuro. Vamos a trabajar con toda la ilusión del mundo y a gobernar el Ayuntamiento como los ciudadanos nos lo han encomendado».