Nevenka vincula a Álvarez con el mundo de la droga y el ex alcalde estudia querellarse por difamación

Lejos de apagarse, el huracán que envuelve al ex alcalde de Ponferrada, cobra cada día nuevos bríos. La ex edil de Hacienda, Nevenka Fernández, atizó ayer las brasas para vincular a Ismael Álvarez al mundo de las drogas. En declaraciones recogidas por el El País, Nevenka Fernández relata que Álvarez le propuso «participaciones en sus negocios de copas (...) En sus locales -afirma- se vende droga, es público. Ahí nunca hacen redadas, ni en sus alrededores controles de alcoholemia. Hay fiestas bakalao y se mueve mucha droga». El ex regidor ponferradino no ocultó ayer su desagrado con estas manifestaciones y aunque insistió en que no quería «entrar al trapo» en declaraciones a este periódico afirmó que estudia seriamente la posibilidad de presentar una querella contra la ex edil de Hacienda por difamación. «Se están diciendo cosas muy fuertes sobre mi persona y me reservo el derecho de iniciar acciones judiciales por la vía penal que podrían tener consecuencias muy graves. Y si decido dar este paso no lo voy a hacer público», manifestó Álvarez. El ex alcalde reiteró que no quería hacer ninguna valoración sobre las acusaciones de la ex concejala de Hacienda. «No voy a entrar porque tendría que desmentir a diario tantas cosas, que no merece la pena», subrayó. En cualquier caso, en manifestaciones recogidas por Onda Cero, rechazó estas acusaciones. Álvarez afirmó que la ex edil miente y que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León es «absolutamente injusta». Además, calificó la rueda de prensa celebrada el lunes en Madrid por Nevenka Fernández de «montaje y circo». «Todo esto -añadió- es absolutamente mentira y ha ido acompañado de una sentencia absolutamente injusta porque no está jurídicamente fundamentada y ni siquiera hay ningún hecho probado», dijo. Además, aseguró que en Ponferrada nadie cree a la ex concejala porque «todo el mundo sabe la realidad». El ex alcalde considera que le «ha caído una desgracia» y que lo único que tiene que saber toda España es que «miente y miente». Finalmente, manifestó su confianza en que el Supremo ponga justicia en este asunto porque «la sentencia está dividida».