Los empresarios apelan al consenso pero creen que Ponferrada debe ser «liberada de esa auténtica rémora»
El Círculo respalda la retirada de los escombros de la montaña de carbón
El Círculo Empresarial Leonés (CEL) terció ayer en la polémica sobre la retirada de los escombros de la montaña de carbón para respaldar est
El Círculo Empresarial reconoce que «ha asistido con asombro estos últimos dos meses, como suponemos le habrá ocurrido a la mayoría de los ponferradinos, al torrente de acusaciones y descalificaciones que se han vivido en Ponferrada con motivo de la contratación de la retirada de los estériles de carbón depositados en el Sector S-3 del PGOU y en la montaña de carbón. Sin embargo -advierte este colectivo en un amplio comunicado- un análisis desapasionado de la cuestión debería haber llevado las cosas por derroteros distintos y sin duda más prácticos». En primer lugar, el CEL cree que «hay que dejar constancia de un hecho sin duda fundamental, cual es el sentir mayoritario de todos los habitantes del municipio, en orden a la necesidad de liberar a la ciudad de una auténtica rémora arrastrada desde la década de los años veinte del siglo pasado, y en consonancia con el cambio de imagen que la ciudad ha experimentado en los últimos años. Parece obvio que se podría encontrar verdadero consenso a la hora de aprobar la decisión de retirar esos estériles del centro de la ciudad, y sobre todo, de evitar el impacto visual que hasta la fecha venían produciendo». En segundo lugar, los empresarios indican que «cualquier experto técnico con el que se consulte, al margen de las pasiones e intereses políticos, nos dirá sin duda alguna que esos estériles no producen otro impacto que el visual y que a estas alturas son multitud los estudios realizados que confirman la viabilidad técnica de los mismos para obras de construcción -como áridos artificiales, material de relleno, terraplenes, tierra armada, hormigones ligeros, etc.-, e incluso como substrato para cultivos y plantaciones forestales». En tercer lugar, señalan «que las propias condiciones de ese material y un mínimo sentido de la oportunidad hacen innecesario convertir su aprovechamiento en un calvario administrativo, producto de considerarlo lo que no es, con el único fin de dificultar una operación claramente beneficiosa para la ciudad». «¿Alguien se ha preocupado en comprobar cómo estaban anteriormente los terrenos donde se han efectuado trabajos de relleno con esos estériles?», se pregunta el CEL para añadir acto seguido: «Sin duda que no, porque de haber sido así no se podría crear tanta polémica. Esos terrenos estaban llenos de restos de balsas de decantación y de otras basuras industriales, de construcción y domésticas, producto de más de cincuenta años de utilización por algunas de las empresas mineras de la zona; y una vez que se ejecute el vial VG-31 de desdoblamiento de la avenida de Galicia por su lindero norte, permitirá su aprovechamiento además de mejorar notablemente la estética y la salubridad del barrio de Cuatrovientos». «Todo ello -añaden- sin desmerecer lo más mínimo al barrio de La Placa, pues el tratamiento de sus taludes con tierra vegetal, lejos de perjudicarle, mejora sensiblemente la visión hacia el norte desde el barrio».