Las empresas se culpan mutuamente de la explosión del gas en el edificio

La explosión se produjo el 20 de diciembre de 2000 en el edificio situado en el número 185 de la avenida del Castillo. Los informes de los peritos han probado que los daños que sufrió el inmueble son irreparables por lo que deberá ser demolido. La Policía Científica determinó en su momento que la explosión se debió a un acumulación de gas y una chispa ocasionada por el ascensor. Durante la sesión de ayer declararon los representantes de las tres empresas involucradas en la dotar el edificio de gas. En primer lugar acudió un representante de Gas Natural, Fernando Guillón. A continuación fue José María Alonso Rodríguez, por parte de Osca Gas, y finalmente Alfredo González Pastor y Beatriz Rodríguez en representación de la firma Eca. Desde Gas Natural, su representante aseguró que la compañía sólo distribuye el combustible y no tienen ninguna responsabilidad en las obras de ejecución que realizó Osca Gas. Esta segunda firma aseguró que sólo certificó la obra principal pero no la acometida del edificio. Por último, Eca, la empresa de control de calidad, aseguró que su técnico no visitó esa acometida puesto que por contrato sólo acuden al 25% de las obras. Los vecinos que sufrieron los efectos de la explosión en sus viviendas han involucrado a esta tres empresas. Por una parte, la empresa concesionaria Gas Natural. Por otra, la firma Osac Gas que realizó los trabajos de instalación de este combustible en el inmueble, y por último de Eca, la empresa inspectora de calidad de esa obra. Hasta el momento, la empresa Gas Natural se ha exculpado ante el juez y había achacado a la firma instaladora, Osca Gas, las responsabilidades. En Osca Gas consideran que son Gas Natural y Eca las responsables.