Desorden, pillaje y peligro en la cantera de Catisa frente a las Médulas

Está a la vista de todos y es accesible a cualquiera —desde el borde mismo de la carretera asfaltada—, sin ningún tipo de control preventivo que alerte del peligro. No hay ni un precinto, ni el más mínimo cartel o señal indicativa que prohiba la entrada o poder moverse por allí. Todo está abierto, con un desorden, abandono, dejadez, olvido y falta de intervención mínima de las autoridades en materia de seguridad pública. La cantera de Catisa —la misma de la que se sorprendió la Reina Doña Sofía por su impacto visual cuando visitó el mirador de Orellán para conocer Las Médulas— está siendo hoy un lugar de pillaje y descontrol total.

Este periódico pudo comprobar sobre el terreno esta semana cómo desde primera hora de la mañana había coches aparcados en medio de la cantera, cargando chatarra y otro material que quedó tras llevarse lo de mayor valor una empresa de desguaces en el proceso de desmantelación, surgido por la quiebra de la sociedad que fundó Martínez Núñez.

Ecologistas, sindicatos y autoridades políticas de máximo nivel no han vuelto a acordarse de la cantera de Catisa, inmersa en el abandono, sin plan de labores de recuperación.

Al cráter central de la cantera se accede sin problemas. M.F.

El único que ha llamado la atención desde hace ya meses sobre el problema y que ha pedido algún tipo de intervención ha sido el alcalde de Carucedo, Alfonso Fernández, y también los pedáneos de las juntas vecinales, que ven cómo tienen ocupados sus terrenos públicos, ahora sin rendimiento. «Tienen arena allí, en terrenos de la junta vecinal, y no podemos coger ni siquiera la grava o zahorra para arreglar caminos. Y no entendemos que tengamos que ir a comprarla a otro lugar, cuando está en una cantera que ocupa un terreno público», indica el alcalde de Carucedo.

Incluso la pedanía de Lago de Carucedo ha tenido problemas económicos porque el contrato con la empresa por los terrenos siguió vigente y tuvieron que continuar abonando el IVA de la factura que no cobraron, dejando casi sin fondos a la junta vecinal. En reuniones de la junta rectora de Las Médulas, el pedáneo de Lago llegó a reclamar una solución sobre el problema de la cantera, pero nada se ha hecho, y el abandono se muestra cada vez más evidente.

Ruta oficial de senderismo

Se da la circunstancia que, ya no es sólo que la cantera de la quebrada Catisa se encuentre en el punto de mira de las cámaras de los turistas que acuden por miles cada año a un lugar Patrimonio de la Humanidad, como es Las Médulas, sino que por el medio de la misma cantera pasa una carretera asfaltada que da acceso a la central hidroeléctrica de Cornatel, de Enel, y además a otro punto de interés turístico reconocido oficialmente. De hecho, siguiendo el vial que pasa por la zona de las tolvas de Catisa se accede a una ruta turística señalizada dentro de la Sierra de la Encina de la Lastra. Hay carteles en el lugar (un tanto deteriorados ya por el paso del tiempo), firmados por la Xunta de Galicia, que señalizan una ruta de senderismo a pie.

Cuadros eléctricos destrozados y balsa de agua sin cubrir. M.F.