Presidencia sopesa ampliar los fondos del Consejo en más de 600.000 euros, pero Esteban recela

Sin recuperarse todavía de la desagradable sorpresa que la produjo comprobar como la Junta no había incrementado el presupuesto del Consejo Comarcal en un sólo euro pese a las promesas de Juan Vicente Herrera, el presidente del Consejo Comarcal, Jesús Esteban viajó ayer a Valladolid para pedir explicaciones ante lo que consideraba como una «monumental tomadura de pelo» por parte del Gobierno regional. La Junta, en sus presupuestos generales para el próximo ejercicio, destinó a la institución berciana -para sus gastos de funcionamiento- una partida de 568.000 euros (94,51 millones de pesetas), la misma cantidad que el año pasado pese a que el presidente Herrera había prometido que las ayudas al Consejo se incrementarían en función del aumento porcentual del presupuesto de la Consejería de Presidencia y de la diferencia en el pago de la renta como consecuencia del traslado al Edificio Minero. Ambos conceptos totalizarían alrededor de 72.121 euros (unos 12 millones de pesetas). Además, en las negociaciones de los últimos meses con Presidencia se les prometió que la Junta duplicaría la consignación habitual del Consejo, para llegar a los 180 millones de pesetas (1.081.821,79 euros) de presupuesto para gastos corrientes. Sin embargo, lo prometido no ha quedado reflejado en los presupuestos regionales que el pasado lunes presentó la consejera de Economía, Isabel Carrasco, y el Consejo se encuentra una vez más con el agua al cuello para subsistir económicamente. Por este motivo, Esteban se desplazó ayer a Valladolid. Allí, se reunió con el coordinador de Presidencia y Administración Territorial, Jesús Méndez, que le apuntó la posibilidad de incluir al Consejo en dos nuevas líneas de subvenciones. Por una parte, en el programa Bierzo-Treviño que repartirá algo más de 601.000 euros (cien millones de pesetas) únicamente entre el condado burgalés y la comarca. Ochenta millones serían para el Bierzo a distribuir entre el Consejo, ayuntamientos y juntas vecinales. La segunda línea reparte también otros 601.000 euros en un plan para financiar obras en las mancomunidades al que también puede acceder la institución berciana. Si efectivamente el Consejo se beneficiase de estas ayudas, dispondría de dinero suficiente para su funcionamiento habitual. Sin embargo, Esteban recela porque ambas vías son únicamente para financiar inversiones y en la Junta ayer no le garantizaron que también podrá disponer de este dinero para gastos corrientes, que es lo que realmente precisa el Consejo.