Rechazo a los nuevos parques
Los ayuntamientos del Bierzo Oeste presentan batalla a los planes eólicos
Trabadelo, Corullón y Vega se oponen de raíz a que la zona se convierta en un campo de molinos
Primero fue el ‘Parque eólico Barjas’ de 221 megavatios y 22 aerogeneradores planteado por la empresa estatal noruega Statkraft. Ahora, Enel Green Power promueve un segundo parque eólico, en este caso denominado ‘Trabadelo’, que contempla la instalación de 18 aerogeneradores (más dos de reserva) con una potencia total instalada de 110 megavatios. Todo en el Bierzo Oeste y todo sin el beneplácito de la gran mayoría de los municipios afectados, que se declaran abiertamente contrarios por el impacto ambiental y visual que ambos proyectos generan. Solo el Ayuntamiento de Barjas se ha mostrado partidario frente a la oposición de varias de sus pedanías y la asociación vecinal. Ahora, también los alcaldes de Trabadelo, Corullón y Vega de Valcarce han dicho no y preparan sus respectivas alegaciones. Incluso, están en contacto para hacer fuerza conjunta.
Ninguno quiere que el Bierzo Oeste se convierta en un coladero eólico. No son contrarios a las energías limpias, pero sí a la ubicación de ambos proyectos porque tanto la instalación como la red de viales necesaria para acceder a los aerogeneradores afecta a zonas de gran valor, como la Peña del Seo y el Hayedo de Busmayor, sin olvidar el Camino de Santiago. En el caso de Corullón, la línea de evacuación del ‘Parque Eólico Trabadelo’ también «pasa a escasos cien metros de la bodega de Descendientes de J. Palacios, que está creando 30 empleos en el municipio» y es uno de los pilares del plan de desarrollo por el que apuesta el municipio: la agroalimentación y el turismo, recordó su alcalde, Luis Alberto Arias.
El regidor de Trabadelo, Ricardo Fernández, tiene previsto reunirse la próxima semana con representantes de la compañía promotora del parque eólico que lleva el nombre de su municipio. Así confía en enterarse exactamente de en qué consiste el proyecto, ya que aunque está en fase de consulta para conseguir la declaración de impacto ambiental, nadie hasta ahora se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento para informar del mismo. «Insólito», lamentó el alcalde, que dejó clara la oposición de la administración a la que representa y criticó que sin información previa, se establezca un plazo de solo 30 días para presentar alegaciones.
«No hemos tenido ninguna comunicación por parte de la empresa. Nos hemos enterado de repente. Estamos en contra y seguiremos estando», aseguró Fernández. Su municipio también se ve afectado por la red de viales del ‘Parque Eólico Barjas’ y sobre este tampoco ha recibido información ni comunicación alguna por parte de la empresa.
Quienes sí se reunieron, el jueves, con integrantes de la compañía que representa a Statkraft en España fueron miembros del equipo de gobierno de Vega de Valcarce. Hasta aquí también llega la red de vías necesaria para acceder al parque y no están dispuestos a aceptarlo. «El futuro de esta zona no pasa por las eólicas», defendió la alcaldesa de Vega, María Luisa González Santín. Se declara partidaria de la energías renovables, pero no de la ubicación elegida para estos parques eólicos. Además, entiende que hay otro tipo de energías limpias más compatibles y que generarían un impacto mucho menor.
«Somos Camino de Santiago y estamos hablando de una zona muy aprovechada por el sector ganadero y con una biodiversidad muy importante. Se podrían instalar saltos hidráulicos, turbinas, paneles solares. Hay otras formas de conseguir energías limpias con menos impacto», defendió González Santín. «De repente deciden que el Bierzo Oeste va a estar plagado de aerogeneradores y no podemos hipotecar nuestro futuro por unos molinos», renegó la alcaldesa, que asegura que los ayuntamientos de la vertiente gallega afectados por el proyecto también unirán sus fuerzas con los bercianos. «Vamos a ponernos de acuerdo para hacer las cosas conjuntamente», dijo.
«Este proyecto se lleva gestando dos años y aquí nadie sabía nada. Nos hemos enterado porque como está en la fase de evaluación de impacto ambiental tuvieron que enviar documentación al Ayuntamiento», explicó el alcalde de Corullón en relación al parque eólico promovido por Enel Green Power y que contempla la instalación de hasta una decena de aerogeneradores en su territorio (Cadafresnas, Viariz, Villagroy y Corullón). A ellos hay que sumar los dos que el proyecto de la empresa estatal noruega plantea ubicar en la Peña del Seo.
Pero los aerogeneradores no son todo. «El proyecto de Enel cose por completo una montaña en Viariz con caminos de hasta 20 metros y en Cadafresnas, se llevan por delante el acuífero que abastece de agua al pueblo y uno de los aerogeneradores está encima de un castro, además de que no cuenta la realidad de la flora y la fauna de la zona», explica Arias en base al anteproyecto presentado. En el caso del ‘Parque Eólico Barjas’, la línea de evacuación «atraviesa mi municipio entero». Lo mismo sucede en el pueblo de Parada de Soto (Trabadelo) pero con la red viaria del parque de Enel. «Pasa por el medio del pueblo. Es inviable», afirmó el alcalde.
Un gran perjuicio ambiental y paisajístico y «cero» beneficios más allá del dinero que dejen los aerogeneradores a los propietarios de los terrenos donde se ubica. «No genera empleo en la zona y los beneficios son para las grandes compañías», criticó el alcalde de Corullón.