Fortaleza emblemática
Cobos: «Nos queda pendiente la pasarela del Castillo Viejo para cumplir el Plan Director»
El arquitecto acompaña mañana al ministro Ábalos y al alcalde en la inauguración de la restauración de la parte más antigua de la fortaleza
Fernando Cobos, en una imagen del año 2001 en las obras de la ronda de la calle Gil y Carrasco. DL
Era el año 1994 y un joven arquitecto como Fernando Cobos recorría los institutos de Ponferrada para dar a conocer a los estudiantes el Plan Director del Castillo, el guión que debería salvar la fortaleza emblemática de la ruina que la acechaba. «Han pasado 27 años y alguno de esos niños igual son hoy concejales, abogados o notarios que verán finalizadas las obras», decía ayer al teléfono. Cobos acompañará mañana por la tarde al ministro de Transportes José Luis Ábalos y al alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, en la inauguración de la que parece la última fase de la restauración del monumento; las obras del Castillo Viejo que han costado 1,64 millones de euros, un 70 por ciento aportados por el Gobierno central con cargo a los fondos del programa del 1,5 por ciento Cultural, y el resto por el propio Ayuntamiento.
¿Pero está realmente acabada la restauración del Castillo de Ponferrada, la fortaleza que llegó a estar cerrada por recomendación del Procurador del Común debido a su deterioro no mucho tiempo después de que Cobos explicara el Plan Director en los centros escolares? «Nos queda pendiente la pasarela desde la plaza de la Encina para cumplir con el Plan Director de 1994», responde a este periódico.
Cobos no renuncia a que algún día se haga. «Estuvo aprobada por Patrimonio, pero no se llegó a ejecutar», cuenta, convencido de que sería el mejor acceso al Castillo Viejo para las personas con discapacidad, que podrían entrar en la fortaleza por un paso al mismo nivel que la plaza. Fuera de la pasarela, solo quedarían «algunas cosillas menores» para, ahora sí, dar por ejecutadas las directrices del Plan Director.
El nuevo Castillo Viejo
El arquitecto que también dirigió los trabajos de recuperación de otra fortaleza tan simbólica como el Castillo de Cornatel en Priaranza del Bierzo, destacaba ayer el trabajo que los obreros, carpinteros y otros especialistas han llevado a cabo en el Castillo Viejo y que va a descubrir a los ponferradinos una parte desconocida del monumento. «Van a poder pasear por entradas, rondas y accesos que no se habían podido visitar antes porque eran inaccesibles y estaban ocultas», afirma, satisfecho con el resultado de las obras.
Acceso restaurado al Castillo Viejo. DL
El Castillo Viejo, insiste, «es un edificio muy rico en historia» que condensa en sus muros desde los primeros asentamientos prehistóricos en la ribera del río Sil, los tiempos en los que los caballeros templarios crearon una primitiva fortificación y las construcciones posteriores. «El Castillo Viejo es muy complejo», añade.
La inauguración de la remodelación del Castillo Viejo ha esperado a que el ministro Ábalos tenga un hueco en su agenda. Mañana estará a las 17.30 horas en la fortaleza para cerrar una etapa más en la recuperación de un monumento que a punto estuvo de ser un campo de fútbol de entrenamiento en la década de los años veinte, cuando se llegó a dinamitar alguno de sus muros del patio interior para hacerle espacio al balón.
Un siglo después, la última inversión partía de un presupuesto de licitación de 1,9 millones de euros que finalmente se adjudicó por 1,64 milllones. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha destinado 1,12 millones y el Ayuntamiento 511.000 euros. Para saber si en el futuro habrá dinero también para instalar la pasarela prevista en el Plan Director habrá que esperar.
