La reparación del atrio de San Nicolás el Real integra el empedrado descubierto

La iglesia-convento de San Nicolás el Real de Villafranca del Bierzo no solo es uno de los templos más singulares, identificativos y monumentales de la comarca, sino que está integrada en un conjunto arquitectónico que, en el siglo XIX, fue sede de la diputación de la entonces provincia del Vierzo y hoy acoge el Museo de Ciencias Naturales. Su valor histórico, patrimonial y turístico es incuestionable, al igual que su obligada protección. Precisamente, acaban de terminar las obra de restauración a las que ha sido sometido el atrio de San Nicolás. Una obra valorada en 179.000 euros, financiada por el Instituto Leonés de Cultura (ILC) de la Diputación de León y que ha sacado a la luz una rampa empedrada al modo tradicional que estaba cubierta por una capa de hormigón armado y que ha sido recuperada.

Se trata de un pavimento enchinarrado ubicado bajo la escalera lateral del acceso a la iglesia. Su descubrimiento obligó al arquitecto Eloy Algorri a repensar la solución que contemplaba el proyecto inicial, tomando en consideración la intención manifestada por el Ayuntamiento de Villafranca de mantener visible el hallazgo. Los propios vecinos de la localidad defendieron esta idea y para darle forma, el proyecto incluyó la creación de una calzada inclinada que incorpora los restos de este antiguo pavimento. De esta manera, se «compatibiliza la exposición del empedrado con la naturaleza de los demás elementos de esta monumental escalera», explicaron fuentes del ILC.

La intervención llevada a cabo ha consistido en la reparación de los «numerosos» daños del atrio, así como en la mejora de «elementos impropios procedentes de reformas improvisadas» y en la «dignificación» de los acabados para equipararlos a la categoría de la fachada del complejo arquitectónico del siglo XVII.

«Se ha saneado completamente el terreno que constituye la base de la plataforma del atrio y se ha desplegado una red enterrada de evacuación de pluviales con objeto de encauzar el desagüe del caudal acumulado. También se ha procedido a recomponer la sillería de la esquina sur y las mamposterías del testero norte y se ha formado una especie de balcón-mirador sobre el paseo inferior. Los sillares fragmentados o que habían perdido materia se han sustituido o recompuesto y se ha colocado un nuevo pavimento con un material duradero y acorde con la dignidad del monumento», explicó Algorri.

El proyecto también ha introducido un elemento nuevo, se trata del tramo inicial de las escaleras, con el fin de «mejorar su categoría material y arquitectónica». Igualmente, se han eliminado las cancelas y se han instalado nuevas barandillas, más acordes con el estilo de la escalinata.

El ILC ha financiado el 90% de la obra y el 10% restante ha corrido por cuenta del Ayuntamiento de Villafranca. Precisamente, el diputado de Cultura, Arte y Patrimonio, Pablo López Presa; acompañado del coordinador de Proyectos del ILC, Emilio Gancedo, han visitado San Nicolás para comprobar el resultado de los trabajos. Lo hicieron junto al alcalde de Villafranca, José Manuel Pereira, y otros miembros de la corporación municipal.