La restauración de la Gran Corta y las escombreras del Bierzo Alto creará 200 empleos con 73 millones
La secretaria de Estado de la Energía y el consejero de Economía presentan en Fabero un plan que debe arrancar este otoño y se prolongará tres años con prioridad para los ex mineros
«Es impresionante», decía ayer la secretaria de Estado de la Energía, Sara Aagesen, mientras contemplaba el cielo abierto de la Gran Corta de Fabero, que llegó a ser el mayor de Europa, desde el mirador del kilómetro 34,5 de la carretera LE-711 donde se había citado con la prensa para anunciar la inversión de 73 millones de euros y la creación de 200 empleos directos en la restauración de tres grandes áreas de 1.062 hectáreas degradadas por la minería del carbón en las cuencas de Fabero-Sil y el Bierzo Alto. «Pues eso solo es el treinta por ciento. Lo gordo está a las espaldas», se oyó una voz entre la comitiva que aguardaba la llegada de los últimos periodistas.
Solo en la Gran Corta, el gran mordisco que ocupa la cuarta parte del municipio de Fabero, el Gobierno ha destinado 38 millones de euros de fondos europeos —y la Junta de Castilla y León se encargará de la contratación de la obra en cuanto firme el convenio con el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco)— para restaurar 700 hectéras de terreno. Aagesen, que se reunió en el mirador con el consejero de Economía y Hacienda de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, acompañada por la directora del Instituto para la Transición Justa, Laura Martin, insistió en que se trata de obras «de mucha urgencia» y una prioridad del Ejecutivo central con la que busca la restauración ambiental de los paisajes del carbón, la creación de empleo para ex mineros y residentes en las cuencas, y la generación, en un tercer paso, de alternativas económicas basadas en el turismo y el sector primario. Junto a la Gran Corta, los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia también actuarán sobre el área de Casares-Ladil-Chacón, en el municipio de Igüeña, y sobre las escombreras que jalonan la ladera del puerto de Manzanal desde Torre del Bierzo a Villagatón-Brañuelas. Los 73 millones suman los 70 que aporta el Gobierno de los fondos europeos y 2,7 de los avales en manos del Ejecutivo autonómico.
Sara Aagesen
Buscamos que estas restauraciones sean modélicas y estamos convencidos de que la Gran Corta lo será
Alcaldes de las tres zonas, Mari Paz, Ramón, de Fabero, Alider Presa, de Igüeña y Gabriel Folgado de Torre y presidentes de las pedanías de Otero y Lillo en cuyos terrenos se asienta la Gran Corta se sumaron a una comitiva donde no faltó el director general de Minas de la Jutna, Alfonso Arroyo, y por el lado socialista, el presidente de la Diputación de León, Eduardo Morán, el presidente del Consejo del Bierzo, Gerardo Álvarez Courel, y diputados y senadores del PSOE, entre otros. Con ellos, Aagesen, que llegó por carretera desde Degaña, donde había presentado una inversión similar para recuperar las escombreras de Tormaleo, pisó después el suelo de la Gran Corta que tanto le había impresionado desde el mirador.
«Buscamos que estas restauraciones sean modélicas, verdaderas buenas prácticas, afirmó antes de añadir que en el Gobierno «estamos convencidos de que el proyecto de restauración de la Gran Corta de Fabero lo será». No en vano, la Gran Corta contará con un recinto de registros fósiles del Carbonífero junto a estructuras de uso público y educativo para impulsar «un turismo cultural, ambiental y paleontológico que sea atrayente, impactante y de calidad», explicó después el Miteco en una nota.
Carlos Fernández Carriedo
Este es un buen ejemplo de lo que hay que hacer para consolidar y crear empleo, un ejemplo magnífico de colaboración.
Carriedo recordó que la Junta ejecutará las obras con los fondos procedentes de la Unión Europea que le llegará a través del Instituto para la Transición Justa. Antes el Ejecutivo autonómico deberá firmar los convenios correspondientes con el Ministerio. Tanto Aagesen como la alcaldesa de Fabero esperan que eso permita que las obras comiencen este otoño. A partir de ahí, el adjudicatario tendrá un plazo de ejecución de 36 meses. «Este es un buen ejemplo de lo que hay que hacer para consolidar y crear nuevo empleo, un ejemplo magnífico de colaboración entre las administraciones públicas», manifestó Carriedo. Y aseguró que el final de la extracción de carbón en 2018 no significa un punto final. «Este es el punto desde el que vamos a construir algo nuevo».
Igual de esperanzado se mostró el presidente de la Diputación. Morán resaltó además el valor simbólico de recuperar la Gran Corta, «que dio tanto por el Bierzo, creó tantos puestos de trabajo y tanta riqueza» ya ahora verá cómo se recupera el paisaje y se crean empleos indirectos «en una zona castigada».