El desenlace del Futur-e decepciona al Bierzo por el bajo impacto en el empleo

De «tomadura de pelo», «lavado de imagen», «vergonzoso» y «de risa». Así calificaron, ayer, los agentes empresariales, políticos y sociales del Bierzo los siete proyectos susceptibles de instalarse en los terrenos de la central térmica Compostilla II. Tanto la patronal como los sindicatos consideran claramente insuficientes las iniciativas planteadas, «migajas» en palabras del secretario comarcal de UGT, Omar Rodríguez; o «desguaces», según el presidente de la Federación Leonesa de Empresarios (Fele) en el Bierzo, Javier Morán. También el alcalde de Cubillos del Sil, Antonio Cuellas, se manifestó en la misma línea y dejó claro que la administración local no está por la labor de que los terrenos de la térmica se conviertan en un nuevo polígono industrial cuando todavía hay suelo disponible en El Bayo.

Casi dos años después de que Endesa presentara las bases del Plan Futur-e, llamado a ser la llave del recambio de la actividad de la térmica una vez que pase a la historia y desarrollado en medio de un sonado secretismo, la desilusión ha entrado en escena tras conocer las soluciones elegidas: Siete proyectos que moverán inversiones por más de 260 millones de euros y generarán 160 puestos de trabajo. Eso —según dijo el alcalde Cubillos— si todos salen adelante. «Hay proyectos más maduros, como el de la planta de reciclaje de baterías de vehículos eléctricos, y otros que están en escala de laboratorio. También los hay que dependen de subvenciones. En definitiva, todavía está todo por ver, al igual que hay que analizar también cómo se va organizar ese suelo industrial», aseguró Cuellas. Para él hubiera sido más acertado apostar por un proyecto de uso integral del recinto. «Había dos y, desde mi punto de vista, eran más interesantes; pero por el motivo que sea no han podido avanzar o no tienen viabilidad y se han quedado en el camino», afirmó.

Y es que Endesa ha sido quien ha tomado la decisión de qué proyectos se ajustan más a los usos que pretende darse al suelo de la central térmica. «En ese comité de evaluación no hubo ninguna votación. Los proyectos que han salido son los que Endesa valora susceptibles de instalarse en los terrenos de Compostilla II», aclaró el alcalde de Cubillos.

«No deja de ser más que un intento de lavado de imagen de una multinacional con esta comarca. Lo que plantean es de risa. Lo que nos traen son desguaces. Seremos el almacén de la chatarra de energías renovables que otros no quieren en Castilla y León, el hazmerreír de la comunidad autónoma», criticó el presidente de Fele Bierzo. Para Javier Morán, lo que Endesa tiene que hacer es «una inversión potente en renovables» que realmente generen empleo y no tratar de actuar como hilo conductor de empresas para su implantación en la comarca porque —dijo— «tenemos terreno suficiente, polígonos industriales acabados sin ocupar, como para poder montar una empresa donde haga falta. Ninguna empresa necesita a Endesa», espetó.

«Solo Tvitec, con muchísima menos inversión, o Stac generan más empleo que todos los proyectos de Endesa, que son enormemente costosos y pretenden ser pagados con fondos de la resiliencia que deberían dedicarse a la pequeña y mediana empresa», aseguró el líder de Coalición por El Bierzo (CB). Iván Alonso calificó de «tutti frutti de miniproyectos» el resultado del Plan Futur-e y propuso la creación de la plataforma ‘Salvar Compostilla’ para que los agentes políticos y sociales de la comarca hagan fuerza conjunta. «Esos proyectos y sus naves de reciclaje con escasos operarios se pueden instalar en El Bayo, en Bembibre, en el polígono de Camponaraya, en Toral o en cualquiera otra ubicación, excepto en las 330 hectáreas del recinto industrial de Compostilla II, que deberían ser reservadas para un gran proyecto locomotor», defendió CB.

La desigualdad entre volumen de empleo e inversión previstos es uno de los aspectos que más molesta. Por ejemplo, el proyecto más costoso, la planta de baterías de almacenamiento de energía valorada en 228 millones «únicamente generaría dos puestos de trabajo», se lamentó el alcalde de Cubillos.

«No se cumplen ni mínimamente las expectativas que se habían marcado. Endesa se está riendo a la cara de todos los ciudadanos del Bierzo y se va de rositas sin que nadie con competencia haya hecho nada para impedirlo», resumió el secretario general de UGT Bierzo.