Medio Ambiente
La restauración de la cantera de Catisa prevé una plantación de 10.500 árboles
El plan de la Junta contempla actuar en 11 hectáreas de frente rocoso, 19 de explanadas y 8 de taludes
Los planes para acometer la restauración ambiental de las 63 hectáreas dejadas por el cráter y aledaños de la cantera de áridos perteneciente a la extinta Catisa en el municipio de Carucedo están ya en marcha. Este periódico ha tenido acceso a los planes que pretende desarrollar la Junta de Castilla y León para convertir en zona verde el área de desperfectos que se ve al fondo desde el mirador de Orellán, desde el corazón de Las Médulas, Patrimonio de la Humanidad.
De forma resumida, se restaurarán 11 hectáreas de frentes rocosos, 19 hectáreas de explanadas o plataformas y unas 8 hectáreas de taludes. Respecto a plantaciones en la zona, se estima un total de 10.500 unidades aproximadamente. El presupuesto de esta última fase asciende aproximadamente a 890.000 euros.
Fase de 300.000 euros
Los planes de actuación se han dividido en tres fases: Una primera de desmantelamiento de lo que queda de las viejas instalaciones industriales. Una segunda de movimiento de tierras. La tercera aparece bajo el epígrafe de «restauración» propiamente dicha. Finalmente aparece una cuarta actuación complementaria que se refiere a redes de drenaje y tratamiento de escorrentías.
La restauración del daño dejado por la cantera se extenderá a lo largo de 63 hectáreas. L. DE LA MATA
Como es sabido, desde la Administración autonómica se ha consignado una primera partida en los presupuestos del 2022 por importe de 668.976 euros para restaurar esta explotación caliza en la zona de la Peña del Rego. Con estos fondos lo primero que se acometerá es el desmantelamiento de las instalaciones y edificios que han quedado de la cantera y la zona de tratamiento de la caliza. «Se demolerán los edificios y muros y se desmontarán las instalaciones tipo grúa o silos. Además, se realizará una limpieza general de la cantera en lo relativo a vertidos incontrolados de escombros y todo tipo de residuos que se han venido realizando desde el cierre de la cantera. El hormigón demolido se triturará in situ y se reutilizará en obra para zonas de relleno. El resto de residuos serán enviados a gestor autorizado. El presupuesto para esta fase asciende aproximadamente a 300.000 euros», indican desde la Junta. Buena parte de esta fase está hecha.
Fase de 255.000 euros
En la segunda fase, referida almovimiento de tierras, tras el desmantelamiento y de forma previa a la restauración, deberán acondicionarse los taludes afectados por las demoliciones para garantizar su estabilidad. «Ello requiere de un movimiento de tierras que contempla la reutilización del hormigón machado en la fase anterior y la limpieza de los montones de tierra repartidos por la explotación. El presupuesto de esta fase asciende aproximadamente a 255.000 euros», refiere la misma fuente administrativa del plan de labores a desarrollar.
En cuanto a la tercera fase, este último proceso contempla la restauración en sí, una vez se ha preparado el terreno para ello. «Se contemplan diferentes actuaciones dependiendo de si se trata de taludes rocosos, zonas planas y zonas en pendiente (taludes). En líneas generales se extenderá una capa de sustrato, se realizará una hidrosiembra y finalmente se plantarán árboles y arbustos de diversas especies acordes con el entorno», señalan.
Balizas de seguridad
El plan de restauración de labores que desarrolla la Junta tras la quiebra de la empresa Catisa que llevaba el grupo empresarial Martínez Núñez contempla otras actuaciones. Además de las tres fases principales anteriores citadas, se incluyen otras mejoras complementarias. Por ejemplo se alude en el plan a la ejecución de una red de drenaje y tratamiento de escorrentías para proteger al arroyo de Balén y también la colocación de elementos de seguridad y balizamiento.