El medio rural del Bierzo clama ayuda sanitaria, sea concertada o pública

"La sanidad rural, algo más que un servicio" abrió tras la ponencia de la delegada del Gobierno, Virginia Barcones, la mesa de debate en la segunda jornada del III Congreso sobre la Economía y Futuro del Bierzo. En ella participaron los alcaldes de Puente de Domingo Flórez, el popular Julio Arias; el regidor de Carucedo, Alfonso Fernández, y el administrador del Hospital de la Reina, Antolín de Cela. Los tres ofrecieron una visión sobre las atenciones sanitarias en los pueblos, las carencias existentes y la necesidad de reforzar esta actividad para mantener población. Sin sanidad los pueblos no existen, vinieron a concluir. Los tres lanzaron un mensaje de ayuda urgente, especialmente para los pueblos de la periferia del Bierzo, la provincia y resto de la comunidad.

Alfonso Fernández dijo que tenemos una sanidad pública, universal y gratuita, "pero nos sentimos no desprotegidos, pero sí con miedo por la pandemia". Por eso agradeció a los profesionales sanitarios su trabajo y entrega. Dijo que a nivel comarcal y local se han hecho manifestaciones, pero enfatizó en que Carucedo y Puente están muy lejos, en la frontera de la gestión territorial. Nos sentimos alejados y sin el servicio sanitario estamos llevados a desaparecer", concluyó. Hay pueblos de 45.000 habitantes que ahora dicen que son pueblos, para acceder a las ayudas, "pero los pueblos son los núcleos pequeños, que necesitan ayuda de verdad. Tenemos pueblos que no tienen consultorio médico y nos sentimos un poquitín discriminados", resaltó Fernández.

Julio Arias, de Puente, resaltó que hay pilares básicos como la sanidad y la educación y estima que en su zona de salud no hemos notado mucho los problemas por los médicos apegados al territorio. "Tuvimos el problema de desplazamiento del pediatra y dejó sin servicio a la zona. Desde un despacho se decidió que fueran a Villafranca, y eso es no conocer el territorio. Pero se solventó, se lo hicimos ver y ahora hay noticias de que en breve tendremos de nuevo pediatra", dijo. También recordó que abrieron guardería con 15 niños, pero destacó que hay municipios, como Oencia, en donde sólo tienen médico a demanda. "Yo no dejaría allí a mis padres. mayores", concluyó, en relación a la falta de médicos.

Antolín de Cela, por el Hospital de la Reina, dijo que la sanidad privada puede suplir a veces las carencias de la pública y se refirió a la campaña en contra de la privada. "Esa imagen se apoya en la ignorancia, en una mala sembradura sindical, que al final atenta contra las personas del territorio. Las concertaciones con la sanidad no es ninguna cosa que deba poner colorado a nadie", señaló De Cela. Recordó que la sanidad de las cárceles ha sido concertada recientemente con la privada. "En el Hospital de la Reina se nos hace una auditoría y si se genera un euro no va al bolso de ningún empresario. Nosotros podíamos trabajar en la sanidad rural, pero tenemos concertaciones de 73 euros cama y día. Imaginaros que hay que mantener la persona con la medicación, con médicos y enfermería noche y día.  Ir a un hotel cuesta 76 euros y exigir la comida y cena sube más", enfatizó. Por eso defiende que "hay que hacer unos conciertos dignos". "Nosotros estamos en desigualdad profunda; no sólo nosotros, sino toda la sanidad berciana. Hay otros conciertos de 150 euros cama día, y San Juan de Dios, 216 euros cama-día", resaltó. Y añadió Antolin de Cela: "Me da la sensación de que nuestros políticos no piden lo suficiente. Creo que no hay igualdad de territorio, ni de medios con otros territorios".

Alfonso Fernández recuerda que el Bierzo está lejos de Valladolid y es necesario una mejor coordinación sanitaria. "No se si somos dueños de nuestro destino y buscar las soluciones desde aquí", dijo. Por eso recordó los conciertos del Hospital de la Reina con Valdeorras. "En cada municipio debe haber un centro médico con médicos. En Carucedo, si alguien se pone mal tiene que ir a Puente, 15 kilómetros y si le da un infarto se pierde mucho tiempo. Tenemos que tener cerca los servicios de urgencias. Sé que los médicos no quieren ir a los pueblos y debía de existir un complemento, un incentivo", planteó. También puso encima de la mesa que pueden compartir pediatra con Puente. "En esa línea de coordinación podemos seguir trabajando", dijo.

Julio Arias recordó que nunca han pedido al representante del Ayuntamiento opinión en la junta de salud creada. "No tenemos ambulancia las 24 horas y sólo cuando movemos el avispero nos hacen caso", resaltó. Recuerda que su población es gente mayor y no saben trabajar con las tecnologías, y la autocita crea problemas, lo que supone que el Ayuntamiento es el que tiene que hacer la labor social. "Es necesario una labor de coordinación mayor. Deben contar más con nosotros porque estamos con los problemas reales de la gente", señaló.

Antolín de Cela se mostró pesimista por el refuerzo para conseguir especialidades sanitarias, dado que estima que no hay médicos. "Por eso, no queda otra que la concertación honesta, a las claras. No digo superdotada, digo elementalmente dotada", dijo. Cree Antolín de Cela que la Fundación de la Reina sigue siendo una solución para la sanidad rural. "Nosotros tenemos médicos y especialistas en traumatología; están acostumbrados a trabajar de otra manera y tal vez no quieren ir a la Seguridad Social. Nos tratan mejor los convenios de Orense que los de Valladolid", enfatizó. Recuerda que traumatólogos del Hospital de la Reina operan en el Barco de Valdeorras (Orense) y el centro colabora y da soluciones. "Y cada vez más, nos piden más trabajo, incluso con nuestro servicio informático, que hace un seguimiento de las personas, desde que nace hasta que muere.  Si hay que concertar consultas, se hace. Todo depende de la voluntad de Valladolid, potenciar esos conciertos", significa De Cela.

Alfonso Fernández remarcó que hay que buscar las soluciones mejores para los vecinos. "La sanidad es el campo de batalla para frenar las despoblación. El Bierzo en sanidad tiene las necesidades de una capital de provincia", dijo.

Julio Arias, por su parte, recordó que existe colaboración y concierto con vecinos de la comunidad gallega de Quereño, donde sólo tienen que cruzar el río para ser atendidos por el médico. A nosotros nos da igual que el concierto sea público o privado; la gente lo que quiere es tener atención. Y si no damos servicios, la gente mayor acabará marchándose e iremos a menos en todos los sentidos", adelantó.

Antolín de Cela incidió finalmente en que no hay que tener miedo a los conciertos. "Concertar no es privatizar, es darle un trabajo a otra entidad, dotarlo de medios y controlar a través de inspección si ese trabajo se hace con dignidad y bien. Los conciertos son necesarios para el futuro", resumió el representante del Hospital de la Reina.