VERSIONES Y DATOS
Roberto Fonteboa. El acusado aseguró el pasado lunes, en la primera sesión del juicio con Jurado Popular que se celebra en la Sección Segunda de la Audiencia, que su novia, con la que convivía con altibajos desde 1999, falleció al ser alcanzada por un disparo accidental. Él conducía un coche con la mano izquierda mientras sujetaba con la derecha el arma, «sin motivo», y al intentar guardarla en el parasol se accionó. La confusión le llevó a meter a Digón en una alfombra y arrojarla al pantano de Bárcena junto con sus pertenencias y la pistola, por «indicación de Nieves Lama», que estuvo con él en todo momento. Nieves Lama. Asegura que no presenció el disparo, porque Roberto Fonteboa y Esperanza Digón la habían dejado en Villamartín sobre la una de la madrugada. Veinte minutos después, el joven fue a buscarla a su casa a gritos. Cuando entró al coche, Fonteboa le mostró el cuerpo de la joven y la dijo que le ayudara a tirarla al pantano o le haría lo mismo a ella y a sus hijos. No pudo arrastrar el cuerpo, porque estaba muerta de miedo. Fiscal y acusación particular. Creen probado que ambos imputados se pusieron de acuerdo para llevar a Digón a un camino, dispararla, intentar estrangularla y arrojarla aún viva al pantano dentro de una alfombra. Entienden que querían matarla «a toda costa». Los padres de la víctima. Recordaron que Fonteboa pegaba con frecuencia a su hija, que tuvo que ser hospitalizada hasta en tres ocasiones. Esperanza había dado a luz a Jessica el 6 de julio, once días antes de ser asesinada. El padre de la niña -Fonteboa- intentaba darla en adopción a una familia de Orense a cambio de dinero, manifestaron. Los abuelos tienen la guarda custodia de la pequeña. Ya tiene dos años. Relación entre los acusados. Fiscal y acusación aseguran que mantienen una relación íntima, que convivieron en una pensión y que en la cárcel, Lama pide comunicaciones vis a vis con Fonteboa. Las penas solicitadas. El fiscal elevó de 17 a 23 años las penas de cárcel para Fonteboa por un delito de asesinato con el agravante de parentesco con la víctima, más tres años por un delito de tenencia ilícita de armas. Para Nieves Lama pide 21 años por asesinato. La acusación particular, ejercida por los padres de la desaparecida, reclama 24 años para el imputado y 23 para la encausada por el asesinato y tres por la tenencia ilícita para él. Las defensas, la libre absolución.