El presidente de la Junta y el secretario de la Energía inauguraron los 42 kilómetros de Toreno a Villablino
Herrera presume de la nueva C-631 como ejemplo de reactivación minera
El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, desembarcó ayer en el Bierzo junto al secretario de Estado de la Ene
El presidente de Castilla y León y el secretario de Estado de la Energía inauguraron el tramo de Toreno a Villablino en los nuevos acceso de Páramo del Sil. Lo hicieron arropados por la práctica totalidad de los alcaldes de los municipios directamente beneficiados, y por un larguísimo séquito de autoridades regionales, provinciales y locales. A la cita no faltaron el consejero de Fomento, José Manuel Fernández Santiago, y la consejera de Economía, Isabel Carrasco. Tanto Herrera como Folgado como Fernández Santiago se recrearon políticamente en sus discursos para resaltar la bondad del programa de inversiones para las cuencas mineras. El presidente de la Junta señaló que en general la transformación de la C-631, primero entre Ponferrada y Cubillos, luego entre Cubillos y Toreno, y ahora hasta Villablino, es la obra más importante de las ejecutadas en la comunidad gracias al Plan del Carbón. Y destacó el trabajo de las constructoras Dragados y FCC, que se han encargado del último tramo, «por las dificultades técnicas del proyecto y por el respeto a las condiciones medioambientales de la zona». Folgado no se apartó mucho de este discurso. Reconoció que cuando era secretario de Estado de Presupuestos no concebía como se podían encajar mil millones de euros cada año para las cuencas mineras, y ahora sin embargo expresó su satisfacción por cómo se están aplicando tanto al ámbito de las infraestructuras, como al de la diversificación empresarial, como a la formación. En los 42 kilómetros de Toreno a Villablino se ganan actualmente diez minutos como mínimo con respecto al anterior recorrido. Pero lo fundamentalmente es que los conductores pueden circular en unas condiciones de seguridad muy superiores. En las obras se han terminado invirtiendo algo más de 40 millones de euros. La calzada tiene siete metros de anchura y arcenes de metro y medio, antes inexistentes. Además se han mejorado todas las travesías y se han abierto cinco tramos para facilitar el tránsito de vehículos lentos. Asimismo se ha tendido un nuevo puente sobre el río Sil. Las constructoras agradecieron la paciencia de los usuarios desde que en junio de 2002 se inició la primera voladura.