El autor de la explosión declara que usó gasolina antes de abrir el gas

El hombre de 36 años, cuya identidad se corresponde con las iniciales J.C.G., utilizó un acelerante, que bien podría ser gasolina, para ampliar la explosión de gas que en la madrugada de este jueves hizo saltar por los aires la fachada y el tejado de un edificio de dos plantas en el número 21 de la calle Alcón, en pleno centro de Ponferrada.

Así lo indicaba el jefe del servicio de bomberos de la ciudad, Oliver Bao, quien explicaba que el asunto está ya en manos de especialistas de la policía científica.

"Las declaraciones a la policía van en ese sentido por lo que dijo de la gasolina, pero estamos a la espera de que llegue un equipo de especialistas de la Policía Nacional para determinar exactamente las causas", dijo Bao. 

 

Personalización municipal 

Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana de Ponferrada, José Antonio Cartón, declaró en el lugar del suceso que la estructura de la primera planta del edificio no se vio afectada, aunque la deflagración si arrancó de cuajo la fachada con las ventanas que acabaron a varios metros en el centro de la calle. El tejado también desapareció por completo en el incendio. El concejal adelantó que se personarán en la causa judicial abierta, dado que hay daños materiales que afectan a la calle.

Fuentes policiales aseguraron que el autor confeso de lo sucedido se personó por su propio pie en la comisaría de Ponferrada, a donde acudió con varias bolsas con enseres propios que tenía en el inmueble de su propiedad. "La he preparado gorda", fue lo primero que dijo al agente que lo atendió pasadas las cuatro de esta madrugada.

En el suceso no hubo heridos. Sí fueron desalojados una decena de vecinos de edificios colindantes, dado que el humo del incendio se propagó por la zona.

 

Un testigo del suceso

Ayer, la calle Alcón permanecía cortada mientras la policía tomaba datos a los dueños de los coches afectados por la deflagración. Hay al menos cuatro vehículos con daños, dos especialmente.

Un vecino del edificio de enfrente al siniestrado, Manuel Rodríguez, declaró a este periódico que él y su pareja, pasaron "un buen susto". "Estábamos en la cama y escuchamos una explosión muy grande, salimos a ver qué pasaba y ya vinos el fuego y todo el jaleo que vino después", señaló.