Nueva estructura
Cubillos y Congosto unirán la cola de Bárcena con una pasarela de un millón
Los dos municipios ya se han reunido con la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil para planificar su ubicación exacta y adelantan el proyecto en una reunión del Camino Olvidado
Al menos un millón de euros de inversión, doscientos metros de longitud y un arco que podría alcanzar los sesenta metros de altura. Son las cifras de la pasarela peatonal con la que los municipios de Cubillos y Congosto que forman parte de la asociación de municipios del Camino Olvidado a Santiago de Compostela quiere unir las dos orillas de la cola del pantano de Bárcena para evitar que los peregrinos tengan que dar un rodeo. Los dos municipios asociados a los veinticinco que forman parte de la ruta que comienza en Irún y desemboca en Villafranca del Bierzo ya ha iniciado los contactos con la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) para levantar la estructura que facilite el paso entre Congosto y Cubillos del Sil.
La estructura, que podría tener hasta una altura de 60 metros en función de la cota donde se apoye, tendrá un coste de «al menos un millón de euros», según la estimación del alcalde de Cubillos del Sil, Antonio Cuellas, que dio a conocer el proyecto junto a la concejala de Turismo de Cubillos, Charo Gómez, poco antes de participar en una jornada divulgativa sobre la ruta alternativa a Santiago que reunió a representantes municipales y hosteleros en el complejo hotelero de La Peña de Congosto.
Ayudas
Cuellas reconoció que los municipios tendrán que tocar la puerta de varias administraciones para recibir fondos con los que cofinanciar la pasarela peatonal de no menos de doscientos metros de longitud, porque Congosto no puede concurrir a los fondos Next Generation al no ser municipio minero. La pasarela ahorrará al menos una hora de recorrido a los peregrinos que ahora tienen que rodear el pantano de Bárcena.
El Camino Olvidado entra en el Bierzo por Colinas de Campo de Martín Moro y termina en Villafranca del Bierzo después de compartir los kilómetros desde Cacabelos con el Camino Francés. A partir de ahí, las dos rutas se solapan.
Las cifras
Los municipios asociados, que ya han invertido algunas cantidades en una primera señalización de la ruta —560 kilómetros desde Irún a Villafranca del Bierzo por terrenos más escarpados y más boscosos que los de Burgos y Palencia—, confían en que la pasarela sobre el pantano de Bárcena se pueda convertir en todo un icono para el Camino Olvidado. Para ello, buscarán ayuda de las administraciones superiores, aunque tanto el municipio de Congosto como el de Cubillos tienen claro que se trata de una obra prioritaria y ya han contactado con la CHMS para obtener los permisos necesarios. La CHMS proyecta también en la zona la conversión en ruta peatonal de la carretera que bordea la Peña de Congosto para unir Congosto con Santa Marina del Sil, cerrada al tráfico rodado por desprendimientos.
En su primer año de existencia de la asociación ya registraron entre 600 y 700 peregrinos y el asesor José Antonio Cuñarro confía en que la cifra se pueda «duplicar o triplicar» cada año a partir de ahora, una vez superado el parón de la pandemia.
Tanto Gómez como Cuellas insistieron ayer en que la promoción de la ruta es una buena herramienta para fijar población en los municipios por donde transcurre a partir del turismo de interior y de naturaleza. La ruta oficial terminará en Villafranca del Bierzo, lugar donde se encuentra la Puerta del Perdón para que los peregrinos enfermos ganen el jubileo en la iglesia de Santiago. Quienes hayan sellado su paso por la ruta alternativa desde Irún en cada una de sus etapas podrán obtener también ‘La Olvidada’ en la Oficina de Turismo de Villafranca del Bierzo.