El Canal Alto pide ayuda a la CHMS para entubar las acequias secundarias

El presidente de la comunidad de regantes del Canal Alto del Bierzo, Gerardo Fernández, planteará a la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil la necesidad de completar las obras de modernización del regadío con el entubamiento de las acequias secundarias que no se llevaron a cabo en 2016. Fernández ha adelantado que solicitará una reunión con los responsables del organismo hidrográfico para pedir ayuda financiera y abordar la mejora de los ramales en vista de que seis años después de la inversión de 18 millones de euros para modernizar el tramo central del canal, tan sólo se haya conectado a la mejora del riego 257 de las tres mil hectáreas activas en la comunidad de regantes.

«Sería en primer lugar una medida de ahorro de agua , porque por las tuberías solo pasaría las que efectivamente se destinaran al riego y no se perdería nada como ocurre ahora con las acequias de hormigón o de tierra», explicaba ayer Fernández.

Esta obra incompleta, junto a la falta de una concentración parcelaria efectiva que acabe con el minifundio que lastra la agricultura en el Bierzo explican el escaso número de hectáreas en el Canal Alto conectadas con la modernización de riego. El campo berciano, insiste Fernández, sigue sin ser una actividad profesional en buena parte.

Las obras de modernización del Canal Alto —en el Canal Bajo ni siquiera han comenzado— no abordaron en su día la conexión de la nueva red principal a una superficie de 300 hectáreas en la zona de Cubillos. Y tampoco se están beneficiando del nuevo riego otras cien hectáreas que sí se habían beneficiado de un tímido proceso de concentración parcelaria en 1957 promovido por el antiguo Instituto de Colonización que se había encargado de reubicar a los vecinos de los pueblos inundados por el pantano de Bárcena, como adelantó Fernández a este periódico a principios de este mes.

Fernández entiende que lo que necesitan los regantes del Canal Bajo supone «un proyecto ambicioso», pero de nada sirve invertir dinero en modernizar el tramo principal del canal, con un recrecimiento que facilitaría además la conexión con los regantes del Canal Bajo, si se dejan sin mejorar las acequias de los ramales secundarios. De ahí la necesidad de recabar ayuda en las administraciones.