Al final parte del viaducto se derrumbó
El Ministerio estudia las causas por las que ayer se derrumbó el tablero de un vano de 50 metros en el puente del Castro, en la A-6, que estaba cerrado por obras Hasta nueva orden, el tráfico se desviará por la antigua N-VI en ambos sentidos
Vista del tablero de hormigón que se vino abajo ayer, a primera hora, sin causar heridos en el viaducto del Castro, en el municipio de Vega de Valcarce. L. DE LA MATA
El fallo estructural detectado hace más de un año por los técnicos del Ministerio de Transportes en el viaducto del Castro de la A-6, de 585 metros de largo, no alcanzaba a presagiar lo que ayer ocurrió pasadas las 10:30 horas: la caída al vacío de un tablero de hormigón de 50 metros entre dos pilares de la doble calzada en sentido La Coruña, que se encontraba cerrada al tráfico por las obras.
El Ministerio de Fomento confirmó ayer que no había que lamentar víctimas entre los trabajadores que están acometiendo los trabajos y anunció el cierre total del viaducto, que se seguía utilizando en sentido Madrid, para analizar «detenidamente» las causas, según remarcaron fuentes ministeriales a este periódico sin ofrecer más detalles.
La medida tomada ayer por la tarde implica que el tráfico en esta zona del Bierzo Oeste pasa a realizarse por la antigua N-VI entre los puntos kilométricos 428 y 432, tanto hacia Galicia como hacia la capital de España. Además, se vuelve a suspender el paso transportes especiales como palas eólicas, algo que afecta sobre todo a LM.
El viaducto del Castro se encuentra situado en el kilómetro 431 de la Autovía del Noroeste A-6, en Vega de Valcarce, y es el más alto del Bierzo. Hace justo un año, en junio de 2021, el Ministerio anunció el inicio de las obras después de una inspección en el marco del sistema de gestión de puentes de la Red de Carreteras del Estado.
Los trabajos se han ido demorando y han obligado a aprobar partidas extraordinarias. El pasado 24 de mayo, el Consejo de Ministros autorizó destinar 14.827.317,34 euros más para unos trabajos declarados de emergencia con el objetivo de «subsanar la situación de grave peligro existente», señalaba la nota oficial del Gobierno, asignación que se sumaba a otra aprobada también por Moncloa en diciembre de 11.622.085,86 euros por el mismo motivo.
El viaducto del Castro tiene graves problemas por la circulación que soportaba y por el uso de grandes cantidades de fundentes en invierno a causa de las heladas y las nevadas en la subida al puerto de Piedrafita, entre otras causas.
La alcaldesa de Vega de Valcarce, María Luisa González, fue cauta ayer en sus declaraciones y aseguró que espera conocer hoy más detalles por parte de la Demarcación de Carreteras. Mientras, el alcalde de Piedrafita do Cebreiro, José Luis Raposo, fue ayer más allá: «No soy ningún ingeniero, pero ahí tuvo que haber fallos cuando fue la construcción», dijo en declaraciones a Europa Press. «Como este modelo de puente solo hay otro en España. Crucemos los dedos todos los conductores cuando pasemos», añadió. La pregunta que surge ahora es doble. Cuánto tiempo más estará cerrado el viaducto y si será necesaria alguna medida extraordinaria. Nadie quiere hablar de volver a construirlo, aunque sea en parte, debido a los fallos estructurales.
La salida del Bierzo hacia Galicia ha tenido ya episodios como el derrumbe de la montaña de La Escrita. Sujetar la pared de la sierra sobre la A-6, a la altura del kilómetro 418 de la Autovía del Noroeste, supuso el desembolso de 34,7 millones de euros y 16 meses de obras, que terminaron el 18 de junio de 2010.
El Ministerio también acomete obras en la actualidad en otro viaducto, el de Río Lamas.