La Junta contrata la concentración de Castropodame por 9,2 millones

El minifundismo, mal endémico de la agricultura del Bierzo junto a la antigüedad de los canales de riego, dejará pronto de ser un problema en el municipio de Castropodame, donde la Junta de Castilla y León ha iniciado el proceso para contratar con un presupuesto base de más de nueve milllones de euros las obras de mejora de las infraestructuras de la zona donde se ha puesto en marcha la concentración parcelaria. La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural comunicó ayer al Consejo de Gobierno la contratación de obras de infraestructura rural previstas en el área donde se unifican las propiedades con un presupuesto exacto de salida de 9.279.059 euros.

Se trata de una actuación que mejorará hasta 78 caminos rurales y que incluye, entre otras obras, la construcción de un nuevo desagüe de 633 metros en el arroyo Las Canales que desemboca en el río Boeza a la altura de la localidad de Villaverde de los Cestos. La concentración parcelaria de la zona de Castropodame abarca 3.784 hectáreas en manos de a 1.759 propietarios que disponían de 37.108 parcela, informaba ayer la Junta. Con la concentración el número de fincas quedará reducida en 4.496, (en torno a un 15 por ciento de las que había) y la superficie media de las parcelas pasará de 0,1 a 0,84 hectáreas, lo que supone multiplicar por ocho su extensión, destacó el Ejecutivo autonómico en una nota.

Los 78 caminos agrícolas que se van a mejorar en el proceso de concentración parcelaria suponen una longitud de 218 kilómetros. La anchura de los viales será después de las obras de cuatro metros, con cunetas de 0,4 metros de profundidad, que se estabilizarán con zahorra natural mediante una capa de 15 centímetros de espesor.

Será necesario realizar movimiento de tierras y obras de fábrica que consistirán en la colocación de caños, marcos y la instalación de la señalización necesaria. El proyecto también contempla adecuar la red de riego a la nueva distribución de la propiedad, con nuevos trazos de acequias y arquetas reguladoras, sustituyendo también en algunos tramos acequias de tierra por tubería de PVC. Por último, también está prevista la restauración ambiental de la zona con el acondicionamiento de las áreas de extracción de áridos.

Las concentraciones parcelarias, destacó ayer la Junta, «favorecen la integración ambiental del territorio y la preservación de los paisajes, ya que, en todos los procesos, además de cumplir estrictamente los condiconantes ambientales de las evaluaciones de impacto ambiental correspondientes, se hace un proyecto de restauración».