«El carbón nos habría equilibrado el precio de la luz»

La mina no volverá. No se cansa de repetirlo Mari Paz Ramón, la alcaldesa de Fabero, a sus vecinos, cuando se enteran de que la guerra de Ucrania y el uso geopolítico del suministro del gas por parte de Putin hará que Alemania recupere el carbón. Ayer también se lo dijo a los espectadores de La 8 Bierzo durante el programa La Tertulia que se emite en colaboración con Diario de León. Pero que no vuelva la mina no quiere decir que no se pueda exprimir la herencia del carbón y buscar alternativas para convertir el polígono industrial en un polo de pequeñas empresas. Mientras tanto, la restauración de la Gran Corta y el empleo de antiguos trabajadores de la mina supone un alivio.

GRAN CORTA Y OTRAS

►►  «Ya hay trabajos en Torre del Bierzo y se está en preparación en el entorno de la Gran Corta». La restauración de 700 hectáreas para convertir lo que fue «un lugar de trabajo en un lugar de ocio» ya está en marcha. Mari Paz Martílnez recordó que se dará empleo a entre 150 y 200 trabajadores, buena parte de los aproximademente 120 inscritos en toda la provincia como excedentes de la minería del carbón. La alcaldesa recordó que en la Gran Corta llegaron a trabajar 500 operarios. La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, además, no va a poner obstáculos al uso de los lagos artificiales en la nueva zona de ocio, que incluye un parque paleobotánico. Las restauraciones también incluirán la escombrera del río Cúa, que se convierte en un verdadero problema cada vez que llueve.

TRANSICIÓN MENOS JUSTA

►► «Hemos esperado cuatro años». La alcaldesa de Fabero reconoció que una transición más justa desde el carbón hubiera tenido que emplear a los antiguos mineros en cuestión de «uno o dos meses» y «cuatro años después es mucho tiempo». Pero la pandemia, las distintas elecciones ha retrasado todo el proceso. «La transición del carbón no está siendo todo lo justa que debería haber sido».

TRANSFORMACIÓN FORESTAL

►► «Necesitamos una empresa que transforme todo lo que el monte nos da para abastecer a Forestalia». Una empresa que aproveché el tirón de la planta de Forestalia en Cubillos revitalizaría el polígono industrial.

POLÍGONO INDUSTRIAL

►► «La restauración de la Gran Corta es un pequeño futuro, pero no es nuestro futuro». El futuro pasa por atraer a pequeñas empresas al polígono industrial, como firmas de nuevas tecnologías que trabajen en régimen de coworking. «Tenemos que poner en valor el polígono industrial, aunque las alternativas de empleo sean difíciles, con empresas pequeñas. Llegamos a tener 5.000 trabajadores en la cuenca, pero eso se acabó». La alcaldesa espera además que la pérdida de población ya haya tocado fondo con los actuales 4.392 habitantes que tiene Fabero frente a los siete mil que llegó a tener.

EL BIC MINERO

►► «El BIC (Bien de Interés Cultural) nos está ayudando» . La alcaldesa está esperanzada con los planes del soterramiento, la recuperación del hospitalillo del Pozo Julia, del edificio administrativo como centro de coworking, o el coliving en el de las antiguas viviendas de los conductores. Queda pendiende el economato, donde abrirá un restaurante y un obrador que de empleo a mujeres víctimas de violencia de género. Cuatro de los 11 refugiados de tres familias ucranianas ya están trabajando. La Escuela de Turismo en un antiguo hotel es otra apuesta, a pesar de que la Junta no apoyó la instalación de un grado de Formación Profesional en Turismo.

EL DUELO DEL CARBÓN

►► «No vamos a volver a vivir de la mina». La alcaldesa es tajante cuando algún vecino le dice que Alemania vuelve a apostar por el carbón para reducir su dependencia del gas ruso. La alcaldesa recuerda que Fabero todavía está asumiendo el fin de su modo de vida minero. «Vivimos la fase de duelo»

TRATO A PUEBLOS MINEROS

►► «Hemos llegado a esto muy solos». La alcaldesa lamentó que los antiguos municipios mineros encuentren tantas dificultades para que sus proyectos con fondos europeos sean aprobados.

PROPIEDADES DE UMINSA

►► «Deberían pertenecer a los pueblos». Martínez reconoce las malas relaciones con los administradores concursales de Uminsa, que debe 80.000 euros al Ayuntamiento, pero no permuta la deuda por propiedades que interesan al municipio. Los terrenos de antigua empresa «deberían pertenecer a los pueblos» que ha sufrido su actividad minera.

EL CARBÓN Y LA LUZ

►► «Se ha precipitado el cierre de las minas. El carbón hubiera equilibrado el precio de la luz». La alcaldesa echa de menos una transición energética donde el fin del carbón hubiera sido más paulatino y aún hubiera abaratado la luz.