Falta de vocaciones
El Hospital de la Reina se queda sin monjas
Una Misa en el centro sanitario despide mañana a las últimas tres Hermanas de la Consolación, que se van ante la falta de relevo
Vinieron a Ponferrada en el año 1944, para dar el relevo a la congregació.n de religiosas —las Siervas de María— que entonces atendía el Hospital de la Reina, que también era Casa de Socorro residencia de la benefiicencia y contaba con el único quirófano de la comarca. Y setenta y ocho años después se van sin que ninguna otra orden las sustituya. Una Misa en el patio del centro sanitario despedirá mañana martes a las últimas tres Hermanas de la Consolación que trabajaban en el Hospital de la Reina, una institución regida por un Patronato del que también forma parte el Ayuntamiento que ya ha cumplido cinco siglos de antigüedad y que firmaba convenios con la congregración para regular el trabajo de las monjas con la titulación sanitaria requerida.
«Me consta que se van con dolor y por falta de vocaciones para poder atender los centros donde mantienen el compromiso de estar presentes. Carecen de personal preparado y en edad de poder servir. Sin ellas, después de 78 años, el Hospital parecerá otro», reflexionaba ayer el administrador de la Real Fundación del Hospital de la Reina y párroco de la Basílica de La Encina, Antolín de Cela.
Fue un 29 de diciembre de 1944, recuerda De Cela, cuando llegaron las primeras Hermanas de la Consolación. «Eran tiempos de pobreza extrema y el Hospital estaba a punto de cerrar sus puertas a no ser por los legados benéficos que algunos particulares le dejaron. Otros muchos establecimientos similares como el Hospital de San Antonio de León fenecieron en aquellos años», cuenta de Cela.
Y fueron seis las monjas que llegaron entonces. «Milagros de amor y ternura tuvieron que hacer aquellas primeras seis hermanas para sacar adelante el Hospital. La congreación fundada por Santa María Rosa Molas también acabaría colaborando con la MSP. «Ayer y hoy, esta será su casa», se despedía ayer de ellas Antolín de Cela.