Arranca el curso político
Por unas infraestructuras del siglo XXI en el Bierzo
La falta de un ferrocarril en condiciones después de la apertura del AVE por Zamora hasta Orense, la autovía A-76 o la modernización de los regadíos marcan hoy el inicio del curso político en el Día del Bierzo junto a los planes de transición
El Salón de Plenos de Ponferrada acoge esta mañana el acto institucional que organizan conjuntamente el Ayuntamiento y el Consejo Comarcal coincidiendo con el Día del Bierzo . Un cita con la que arranca el curso político que vendrá marcado por las próximas elecciones municipales, en 2023.
Las infraestructuras protagonizan el futuro inmediato del Bierzo y centrarán gran parte de las intervenciones, junto con los proyectos de transición justa y de Endesa tras el cierre de Compostilla , que aún no han arrancado, sin olvidar el proyecto de modernización del Canal Bajo , verdadera columna vertebral para un cambio radical en el sector agroalimentario.
La entrada en funcionamiento del AVE a Orense por Zamora, las pasadas Navidades, ha puesto de manifiesto que el Bierzo ya no compite en igualdad de condiciones con otros territorios. El mejor ejemplo: ya se tarda menos en ir a Madrid desde La Coruña que desde Ponferrada. Y lo mismo se puede decir de las carreteras después del doble derrumbe en Piedrafita, que ha cortado la A-6. La alternativa por autovía para los grandes transportes como las palas eólicas de LM es ir hasta Benavente y desde la localidad zamorana por la autovía de las Rías Baixas. El proyecto de la A-76 Ponferrada-Orense, hoy más necesario que nunca, sigue guardado en el cajón del Ministerio.
Más médicos
Las deficiencias sanitarias, el tercer pilar de las reivindicaciones de la comarca, se reflejan en el Hospital El Bierzo, con competencias de la Junta, que tiene grandes deficiencias con falta de médicos, listas de espera y una radioterapia que no acaba de poner la primera piedra, lo que obliga a pesados viajes para muchos enfermos bercianos de cáncer.
Con ese panorama, todo está por hacer en una comarca que no puede esperar después del cierre de minas y térmicas y que sólo llega a los telediarios cuando se produce el derrumbe de alguna de las antiguas chimeneas de lo que fue su gran imperio: la producción de electricidad con la que alimentó parte de la industria de todo el país y otras regiones ricas, pero deficitarias en luz.
En los tres apartados, todo está por hacer. En materia ferroviaria, el Bierzo ha quedado tan atrás que el trayecto hasta León se hace por el mismo recorrido que hace 140 años. Mientras la capital leonesa se conecta con Madrid en dos horas y pronto tendrá una nueva fuente de ingresos con la apertura de la Variante de Pajares hacia Asturias, Ponferrada ha perdido la mayor parte del peso ferroviario.
Obsoleto
El Ministerio de Transportes, en la etapa de José Luis Ábalos como ministro, prometió un estudio sobre las posibilidades de solucionar el ‘lazo del Manzanal’ para mejorar los tiempos de viaje a León y, sobre todo, para conectar Ponferrada a la red AVE. No en vano, la capital del Bierzo tiene tantos habitantes o más que otras ciudades de Castilla y León como Palencia, Segovia o Zamora, que ya disfrutan de sus ventajas.
La A-76 no ha avanzado ni un kilómetro en los últimos años. En 2018 se dio el último paso. El Ministerio sometió a información pública el Proyecto de Trazado correspondiente al tramo Villamartín de la Abadía-Requejo, en el Bierzo con un presupuesto estimado de licitación de las obras de 101,6 millones de euros (IVA incluido). No sólo es clave para el Bierzo. Valdeorras miraría aún más hacia el Bierzo a la hora de sus compras...
Otra autovía
En carreteras también está en el debe la Ponferrada-La Espina, que abriría una nueva vía rápida hacia Asturias. La única opción, en este caso, es que sea incluida en el nuevo plan que prepara el Ministerio para los próximos años. No sería una autovía en todo su recorrido para salvar la Cordillera y necesitaría financiación autonómica.