Derribada la casa en ruinas junto al monolito de Jerónima Blanco

Amenazaba uno de los monumentos que más emociones despiertan entre los bercianos. El Ayuntamiento de Ponferrada ejecutó ayer la demolición de la vivienda en ruinas junto al monolito en memoria de Jerónima Blanco y su hijo Fernando Cabo, asesinados en 1936 por un grupo de pistoleros falangistas que buscaban a su marido Isaac Cabo, huido en el monte Pajariel.

La Brigada de Obras culminó a última hora de la mañana el derribo del inmueble situado en el número 340 de la avenida de Portugal, en el barrio de Flores del Sil, en vista de que su propietario, finalmente una sociedad empresarial domiciliada en Madrid no ha hecho caso de los requerimientos municipales. El procedimiento, explicó el concejal del área, Pedro Fernández Robles ha sido «largo y farragoso, ya que no aparecían los dueños». Al equipo de gobierno ya le hubiera gustado haberlo culminado antes de la inauguración del monolito en memoria de Jerónima Blanco, que estaba embarazada, y su hijo Fernando

«El estado de este inmueble era ruinoso y amenazaba no solo la integridad del monumento, sino que también representaba un peligro para la integridad de las personas que transitaban por esa acera o que querían acercarse al monolito conmemorativo», explicó el Ayuntamiento en una nota. El concejal del área, Pedro Robles, insistió después en que el riesgo para los peatones que transitaban por la calle era evidente.

Robles, edil de Sostenibilidad Medioambiental de Ayuntamiento de Ponferrada y por la concejala de Infraestructuras, Carmen Doel se acercaron a Flores del Sil para supervisar los trabajos de demolición. El Ayuntamiento trasladará ahora a los propietarios la factura del derribo.