La restauración en marcha de la cuenca del Bierzo Alto y Brañuelas con 11,5 millones de euros devuelve miles de toneladas de escombro a los cielos abiertos para tapar los excesos de los últimos años de la minería.
La escombrera de Las Llamas en Santa Cruz de Montes es una de las más grandes del Bierzo Alto. Ya ha rellenado el cielo abierto de Llamazón y aunque quedan miles de toneladas. En la foto, el alcalde de Torre, Gabriel Folgado. L. DE LA MATA
Material de la mina, en un sencillo homenaje al carbón a las puertas de Santa Cruz, con la escombrera al fondo. L. DE LA MATA
Así estaba el cielo abierto de Llamazón en Santa Cruz en el año 2001. Hoy acaban de cubrirlo. L. DE LA MATA
Ganado de Santa Cruz, muy cerca de la escombrera en fase de restauración. Los escombros, en muchos casos, han sepultado manantiales que alimentaban pastos imposibles de recuperar hoy. L. DE LA MATA
Mujeres de Santa Marina de Torre trabajando en los años sesenta en uno de las escombreras. DL
Escombrera en Brañuelas, vista desde la ladera de Malabá. L. DE LA MATA
Máquinas de Tragsa trabajando en la cumbre de la escombrera de Brañuelas. L. DE LA MATA