Folgueral anuncia que eliminará la Zona de Bajas Emisiones si gobierna

El que fue alcalde de Ponferrada, Samuel Folgueral, calentó ayer motores electorales y como dirigente de USE anunció que, si de nuevo vuelve a gobernar en la capital de la comarca, suprimirá o dejará fuera de uso la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en la ciudad. Directamente eliminará las restricciones de paso de vehículos a los barrios del centro, acotados con restricciones al paso de vehículos viejos, tal como ahora pretende implantar el actual alcalde, el socialista Olegario Ramón y su equipo de gobierno.

Folgueral dijo a los periodistas convocados a la entrada de la avenida de La Puebla que Ponferrada no necesita restricciones de movimiento de personas por contaminación, por la sencilla razón de que tal contaminación aquí no existe. No cuestionó con ello para nada el cambio climático y estima que lo único que a su entender ocasiona la medida que defiende el actual alcalde es causar problemas y más cargas a los ciudadanos, a los que quieren moverse libremente, a los comerciantes que están viendo cómo no llegan más clientes porque se le complica y prohíbe el paso de vehículos y también a los que no se pueden comprar un coche eléctrico o más nuevo, con una tecnología en desarrollo.

«Este que les habla, Samuel FolGueral, dentro de tres meses, siendo alcalde de Ponferrada derogará la Zona de Bajas Emisiones, por considerar que el centro urbano es ya sostenible y las actuaciones que se pretenden acabarán convirtiendo en insostenible este espacio central de la ciudad». Recordó Folgueral que siendo alcalde en el 2014 ya aprobó un plan pionero, como fue el  plan de movilidad urbana sostenible (Pmus), pero la actuación que impulsa ahora Olegario Ramón  en el centro «adolece de varios factores que no comparte el conjunto amplio de la ciudadanía».

Folgueral argumenta que la ZBE por ley tendría que haber entrado en activo el 1 de enero de 2023 y sigue sin ser efectiva. «Por tanto, hay un incumplimiento claro del cronograma», dijo. También remarca que la zona de bajas emisiones carece de estudios «suficientemente rigurosos» que aluda a la mala calidad del aire en este lugar. Entendemos así que esto es un bluf sin datos fiables».

En tercer lugar Folgueral destaca que la ZBE carece de un estudio económico que valore desde el punto de vista municipal ingresos y gastos de estas actuaciones. Entiende que también adolece de un estudio económico del conocimiento del impacto que va a tener que soportar el centro de la ciudad, los negocios, la hostelería, los trabajadores de esta zona centro, así como los dueños de un piso o local comercial. Desde USE creen que el impacto será muy negativo. Por eso aboga por eliminarlo.