El gigante eólico entra de lleno en el núcleo reproductor del oso pardo

El Alto Sil es una zona osera pura y estable, el principal núcleo reproductor del oso pardo en la provincia de León, al nivel del Alto Narcea y Somiedo en Asturias. Con una buena densidad de osos y un número importante de hembras reproductoras, el Alto Sil "envía ejemplares a otros territorios y está facilitando la expansión de la especie hacia el sur", subrayó el presidente de la Fundación Oso Pardo (FOP), Guillermo Palomero. Pues en ese Alto Sil, se ha proyectado un parque eólico de 20 aerogeneradores que acaba de salir a información pública, abriéndose así el período de alegaciones. Se denomina Alto Bierzo-Sil porque afecta a montes de los municipios de Igüeña, Noceda del Bierzo, Páramo del Sil y Palacios del Sil. Es en los dos primeros donde se ha contemplado la ubicación de los molinos, pero el efecto del parque se extiende hasta la misma carretera CL-631, donde está la subestación de Ondinas que recibiría la energía generada. Es decir que la línea de evacuación atravesaría por completo el Alto Sil con lo que ello supone para el hábitat del oso y de otras especies. 

Casi 112 millones de euros prevé invertir el promotor, Cefiro Holdco, en un parque eólico que tendría, de salir adelante, una potencia instalada de 126 megavatios, limitada en generación a la capacidad de acceso concedida de 119 megavatios, y estaría integrado por una veintena de aerogeneradores de 6,6 megavatios o 6 megavatios de potencia unitaria, según recoge el informe publicado este viernes en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).

Es el primer proyecto eólico que, oficialmente, afecta al Alto Sil. Sí ha habido alguna solicitud anterior para la Sierra de Gistredo, pero nunca antes el gigante eólico había intentando entrar de lleno en el núcleo duro reproductor del oso pardo en la provincia de León. Por eso, el equipo jurídico de la FOP ya está analizando la documentación que se ha hecho pública con el fin de presentar alegaciones a un parque que es "totalmente incompatible con la conservación del oso", aseguró Guillermo Palomero, presidente de una fundación que ya ha presentado alegaciones a los, aproximadamente, 60 proyectos de energías renovables que se han presentado para la Cordillera Cantábrica y zonas de expansión como La Cabrera. Solo en esta comarca leonesa hay entre 10 y 15 iniciativas.

"Hay sitios de sobra para implantar las renovables sin tener que afectar al hábitat del oso pardo o a las zonas de expansión. Hay zonas de exclusión que deberían respetarse y haremos todo lo posible para evitar que este parque se lleve a cabo", garantizó Palomero, que incidió en la importancia del Alto Sil como zona reproductora y en el daño irreparable que supondría romper la estabilidad poblacional actual. Los accesos y las pistas que hay que crear para llegar no solo hasta los aerogeneradores, sino también hasta las torretas que sostienen la línea eléctrica es el principal problema. "Es una de las causas fundamentales de la incompatibilidad, porque conlleva la destrucción de un hábitat que debería ser tranquilo", apuntó el presidente de la FOP.

La longitud total de la línea aérea proyectada para llevar la energía desde la zona de producción hasta Ondinas supera los 16 kilómetros, con 47 apoyos. La parte de la línea soterrada es de apenas 1,3 kilómetros. La misma empresa promotora, Cefiro Holdco, ya solicitó autorización para instalar una torre de medición meteorológica en el municipio de Páramo del Sil en 2021. Una acción que puso sobre aviso a los colectivos conservacionistas que vigilan el desarrollo de las energías renovables, que ya entonces enviaron un escrito al Ayuntamiento de Páramo solicitando información respecto a si dicha estación meteorológica llevaba asociado algún parque eólico, como suele ocurrir. Entonces, el Ayuntamiento respondió asegurando que no. Menos de dos años después se ha conocido la intención de esa sociedad con sede en Galicia de desarrollar un proyecto en la zona.