La huelga cumple su segundo día sin acuerdo a la vista
FCC insiste en que las retribuciones son ya un 21,3% más altas que el convenio provincial
FCC Medio Ambiente quiso dejar ayer clara su postura ante la huelga de los servicios de limpieza viaria y recogida de Ponferrada en un segundo día de paro protagonizado por algunos indicidentes como el vuelco de contenedores o la actitud de un responsable de la concesionaria con un sindicalista, según el Comité.
El Pliego de condiciones que rige la ejecución del contrato en vigor establece que el convenio a aplicar a los trabajadores de la plantilla debe ser el de ámbito provincial, recalcó un portavoz, que recordó que el convenio que reclama el sindicato CGT está extinto desde el 31 de diciembre de 2017, tal y como el propio articulado contemplaba en sus artículos 2 y 3. «FCC Medio Ambiente está aplicando en la actualidad, de acuerdo con dicho Pliego, las condiciones de que disfrutaba el personal subrogado, que alcanza el 90% de los trabajadores de la plantilla», señaló la empresa.
El nivel retributivo del personal actual del servicio de limpieza viaria y recogida de residuos de Ponferrada está un 21,35 % por encima del convenio de limpieza y recogida provincial; «y, analizado en el ámbito de distintos sectores productivos de la provincia de León, es más de un 60% superior al promedio provincial», explicó el mismo portavoz empresarial en un comunicado.
Sin embargo, CGT aseguró que «es totalmente falso que nuestro convenio está extinguido, ya que si fuera así, las condiciones de los trabajadores y trabajadoras seguramente ya habrían sido cambiadas por la propia adjudicataria». Además, sobre los sueldos, el Comité de Empresa aseguró que las cuantías se tienen que respetar, «ya que está incluida en el cálculo del contrato». «Lo que intenta con estas maniobras es aumentar los beneficios empresariales a costa de los trabajadores y trabajadoras», denunció el sindicato.
Pese a todo, la empresa sigue dispuesta negociar mientras desde la oposición del PP se sigue exigiendo la intervención del alcalde, Olegario Ramón.
El portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Ponferrada, Marco Morala, aseguró que «es absolutamente insuficiente que el alcalde diga obviedades respecto a que secunde la huelga con libertad quien quiera. Tanto tiempo de experiencia y militancia sindical para una obviedad tan grande. Y para dejar la insinuación de que se puede obligar a los trabajadores a secundar una huelga que pudieran no querer seguir. No da esa impresión a la vista del resultado de la asamblea de los trabajadores. En cambio, lo que sí da la impresión es que como no exista una mediación decidida la huelga puede ir para muy lejos, en detrimento de la ciudad, sus ciudadanos, sus negocios, su imagen pública y hasta su salubridad, y también en detrimento de los propios trabajadores del servicio de limpieza, que habrán sopesado seriamente las razones para llevar a cabo esta huelga».
También el concejal no adscrito Manuel de la Fuente se sumó ayer a las críticas asegurando que ya advirtió que «no municipalizar el servicio de recogida de residuos sólidos y limpieza viaria traería sus consecuencias y que la subcontrata de peones para cubrir una parte de los servicios efectuada por la adjudicataria para abaratar costes y permitida por el equipo de gobierno traería problemas». De la fuente también tachó de «maniobra sucia e insolidaria» la propuesta última de Comisiones Obreras.
Olegario Ramón volvió ayer a rechazar los disturbios que se registraron durante la noche, con la quema de un contenedor o vertiendo basura a las puertas del colegio de Campo. El alcalde de Ponferrada reiteró que el conflicto no se solucionará con dinero público.