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LA ETERNA POLÉMICA

La CIA ya escribía El Bierzo en un documento de 1949

Un documento desclasificado muestra cómo escribían el nombre de la comarca

Páginas del informe de la CIA. DL

Ponferrada

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Un documento desclasificado por la CIA, la agencia de inteligencia de Estados Unidos, prueba que diez años después de acabada la Guerra Civil aún existían grupos guerrilleros en la zona de Galicia, Zamora, Asturias y El Bierzo, con el artículo en mayúscula .

Así se puede leer por dos veces en un informe firmado el 18 de junio de 1949 bajo el epígrafe ‘Instrucciones del Partido Comunista a las guerrillas gallegas» en el que se informaba sobre las órdenes que, supuestamente, recibieron desde el PCE quienes aún combatían en las montañas del Noroeste de España, una de las zonas más represaliadas por Franco durante y después del alzamiento de 1936.

El Bierzo aparece citado al dar cuenta de las zonas en las que se va a dividir la estructura guerrillera. «Estos últimos —se refiere a los guerrilleros que aún resistían en Galicia, el Bierzo y parte de Zamora y Asturias— recibieron instrucciones de cumplir sus órdenes junto con elementos locales y otras personalidades que estaban programadas para ser enviadas a España desde América. Se encomendó la máxima responsabilidad al Jefe del Grupo Guerrillero de Galicia y al Secretario General del Partido Comunista de Galicia», señalaba el documento en inglés, que lleva el sello de secreto y confidencial. y que se puede encontrar en la página web de la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos.

Detalle de El Bierzo. DL

«El Jefe del Ejército Guerrillero de Galicia tratará de constituir su Estado Mayor de acuerdo con la Directiva «106 B» dictada por la Comisión Militar del Partido, que tiene por objeto la reducción de secciones y la concentración de servicios, de manera que no haya más de tres oficiales de Estado Mayor.  Para ello, el Jefe de Estado Mayor deberá estar a cargo de las secciones primera y tercera, otro oficial a cargo de las secciones segunda y quinta,  y un tercero a cargo de la sección cuarta y de los servicios de municiones y armamento», señala el informe desclasificado.

Según los confidentes de la CIA, los guerrilleros a las órdenes del PCE estaban intentando constituirse en siete grupos. En el séptimo estaba incluida la comarca berciana. El primero era gran parte de Orense, salvo Valdeorras; el segundo, casi toda la provincia de Pontevedra; el tercero, lo que faltaba de Pontevedra y La Coruña; cuarto, Ferrol; quinto, Lugo y parte de Asturias (Castropol y Navia) y séptimo, el Bierzo, parte de Zamora y Valdeorras.

En el documento hay otra cita sobre El Bierzo después de dar cuenta de que «las fuerzas del Ejército de Galicia que actúan en las zonas administrativas de las Provincias de Oviedo y Zamora, por razones políticas, no se permitirán ser conocidas como fuerzas dependientes subordinadas a Ejército de Galicia,  o al Secretario General del Partido Comunista». La siguiente frase dice: «Esto no se aplica a las fuerzas activas en la zona de El Bierzo».

Según el documento, la Sección Gallega del Partido Comunista trataría de, «en la medida de lo posible», tener en cuenta las opiniones y consejos ofrecidos por los líderes republicanos, «quienes, tanto en interior como en Francia, han mantenido una cordial relación». En ese sentido, añade el informe de la CIA, el Partido Comunista de Galicia había enviado meses antes, en 1948, instrucciones adicionales para que el jefe del Ejército Guerrillero de Galicia —cuyo nombre no se cita en los tres folios del informe— ofreciera «su colaboración y apoyo a los organismos políticos que propugnen la unificación de la acción antifranquista de todas las organizaciones clandestinas que se oponen al régimen y que incluyen en sus programas la restauración de la República y el establecimiento de la autonomía de Galicia».

Esa colaboración se tenía que traducir también «en la distribución de ayuda financiera y de otro tipo a las familias de los guerrilleros;  servicio de enlace entre diversos grupos y entre éstos y personas civiles; mantenimiento de conversaciones o contactos con determinados elementos con el fin de obtener apoyo para las actividades de la guerrilla; responsabilidad por los depósitos de armas, municiones, víveres y útiles que el Ejército Guerrillero instalará en la zona civil».

El único nombre que aparece en el documento es el del coronel José García Acevedo que, según la CIA, había sido asignado en misión dentro de España por la Comisión Militar del Partido Comunista de España, a principios de diciembre de 1948 con el cometido de estudiar los problemas de reorganización de las unidades del Ejército Guerrillero de Galicia.

«Para el servicio de enlace —dice el informe secreto— García Acevedo tiene previsto emplear a once personas especialmente asignadas a él, ocho de las cuales aún residían en Francia y América a principios de diciembre.  La fuente afirma que este servicio de enlace independiente se crea por la falta de confianza en los contactos actuales que al parecer son muy conocidos de la policía franquista y que han sido acusados de ser los responsables de las recientes detenciones de militantes del Partido en Galicia».

«García Acevedo y el Jefe del Grupo Guerrillero de Galicia participarán en reuniones previstas para el mes de enero para reunir a Jefes de Ejércitos y Grupos para discutir la aplicación del plan táctico», es la última información que se puede leer en el documento de los agentes en España.