Linda y Romero son dos mulas de La Rioja que durante ocho jornadas de trabajo han arado seis hectáreas de viñedos centenarios en la zona de Otero para evitar que las cepas se muera. El Bierzo recupera así una práctica perdida hace tres décadas y que ya contaba con el precedente de las mulas de Ricardo Palacios.
Las mulas de la Rioja han trabajado ocho jornadas para arar seis hectáreas de viñedos viejos en la zona de Otero. ANTONIO FERNÁNDEZ
"No es barato ni es un capricho", explica Elva García, de Bodega Aníbal de Otero, para resaltar la importancia del arado manual para salvar viñedos viejos. BODEGA ANÍBAL DE OTERO
Linda y Romero se llaman las dos mulas, guiadas por las manos expertas de dos trabajadores de Mali, Siole y Mamadou. BODEGA ANÍBAL DE OTERO
Las mulas han trabajado para Bodega Aníbal de Otero, Valle Blanco y Luzdivina García. BODEGA ANÍBAL DE OTERO
Linda y Romero ha permanecido estabuladas en instalaciones de Valle Blanco durante su estancia en el Bierzo. BODEGA ANÍBAL DE OTERO
Las mulas pertenecen a la empresa de labranza del viticultor riojano Miguel Ángel Mato, 'el rey de las mulas'. BODEGA ANÍBAL DE OTERO
Los viñedos centenarios necesitan un arado manual para evitar que la tierra se cierre con los años. BODEGA ANÍBAL DE OTERO
Las seis hectáreas de viñas aradas están en la zona de Otero. BODEGAS ANÍBAL DE OTERO