Veganzones sobre Embutidos Santa Cruz: "Acompañaremos a la empresa en todo el proceso de reconstrucción"
El consejero de Empleo confirma el respaldo de la Junta a la industria cárnica berciana destruida por el fuego y pone sobre la mesa todas las ayudas posibles, empezando por "agilizar" la tramitación del Erte para la plantilla
La reunión celebrada esta tarde entres los responsables de la Junta de Castilla y León -con el consejero de Industria, Comercio y Empleo, Mariano Veganzones, en cabeza- y el administrador de Embutidos Santa Cruz ha servido para constatar lo que este periódico ya adelantó esta mañana. La Junta respaldará la reconstrucción de la industria cárnica, ya que esta es la intención del empresario, y lo hará poniendo a su disposición "todas las líneas de ayudas y financiación" de las que disponen las consejerías de Agricultura, Empleo y Economía.
"Acompañaremos a la empresa a lo largo de todo el proceso de reconstrucción", ha dicho Veganzones al término de la reunión celebrada en la sede de la Delegación Territorial de la Junta en León, en la que también han participado el viceconsejero de Economía y Competitividad, Carlos Martín Tobalina, y la directora general de Industria y Cadena Agroalimentaria, María José González; además del director general de Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales, Fernando de la Parte; y el delegado territorial, Eduardo Diego.
El objetivo de la Administración autonómica al proponer la reunión era conocer de primera mano los planes del propietario de Embutidos Santa Cruz e informarles de todas las líneas de ayudas para que "puedan retomar la actividad y recuperar el empleo de los afectados en la mayor brevedad de tiempo posible".
"La búsqueda de soluciones y apoyo a las empresas en crisis, así como las afectadas por grandes siniestros de la Comunidad es una de las funciones de la Junta de Castilla y León. Tal y como se actuó en el siniestro del grupo Cascajares o anteriormente con Campofrio, Ornua, Embutidos Hermanos Rodriguez o Iberavi", han destacado los intervinientes.
Las ayudas disponibles
La situación en la que queda la plantilla es uno de los asuntos más sensibles y el consejero de Empleo se ha comprometido a agilizar los procesos de tramitación del "presumible Erte de suspensión por fuerza mayor".
"La empresa va a tener a su disposición línea directa y cercana con las personas que van a ayudarles a presentar el Erte. De esta manera, desde la Consejería se les va a orientar, tanto a la empresa como a los trabajadores, sobre los pasos a dar, aplicando celeridad e información para la comunicación previa del erte, la negociación en el periodo de consultas, comunicación final del periodo de consultas y el informe de la inspección de trabajo para constatar la fuerza mayor", detallaron fuentes de la Administración.
Asimismo, se les ha presentado la línea de subvención ATRER, dirigida a los trabajadores afectados y durante el periodo que dure su ERTE. Cabe destacar que esta línea compensa hasta casi un 100 % la pérdida salarial a la plantilla. Y también las subvenciones existentes para que la empresa adquiera nuevos equipos de trabajo, cuyo plazo de convocatoria está abierto hasta el 30 de julio.
Por último, la Consejería de Industria, Comercio y Empleo les ha informado sobre la línea de bienestar laboral: actualmente abierta hasta el 31 de octubre. La empresa puede realizar actividades de atención psicológica para la gestión de la crisis que reduzcan la intensidad de los estresores. Presenciar una catástrofe mayor puede tener consecuencias psicológicas sobre la plantilla, que deben ser atendidas. Además, durante el proceso de nueva instalación, los trabajadores pueden mejorar su estado de salud física y mental a través de programas de bienestar laboral.
Desde la Dirección General de Industria y Cadena Agroalimentaria, tal y como hicieron con el incendio de Cascajares, ponen a su disposición una ayuda a la inversión productiva en transformación y/o comercialización de los productos agrarios, silvícolas y de la alimentación, que le permitiría reconstruir la fábrica.
Por su parte, el Instituto para la Competitividad Empresarial (ICE) pone a disposición de la empresa las medidas de financiación empresarial para mejorar la competitividad, en este caso para facilitar la recuperación de la actividad empresarial. Así están disponibles hasta 14 líneas destinadas al desarrollo de operaciones de préstamos avalados destinados a inversiones y circulante para creación de empresas, modernización y ampliación de sus procesos productivos, que cuentan con bonificaciones de los costes financieros.
También se facilita a la industria medidas financieras extraordinarias que abarcan desde la adecuación financiera, anticipos de subvenciones y mantenimiento del empleo, entre otros aspectos. Asimismo, se ponen a su disposición programas de capitalización adaptados al tipo de financiación necesaria. Y, por último, ayudas para la adquisición de activos, para la puesta en marcha de actividad y proyectos de inversión.