El pueblo que no quiere cipreses en el cementerio porque ensuciaban tumbas
Los árboles, que tenían entre 100 y 200 años, no ofrecían peligro en el cementerio
Momento en el que se echa abajo uno de los tres cipreses con la ayuda técnica. DL
No se sabe muy bien quién dio la orden (el Ayuntamiento no tiene nada que ver en la acción), pero lo cierto es que los tres cipreses centenarios que apuntaban su afilada copa al cielo desde el interior del cementerio de Sancedo ya son historia muerta. Los tres árboles fueron talados a media mañana del pasado viernes, según se puede comprobar en las fotografías remitidas a este periódico por un testigo.
El técnico medioambiental del Ayuntamiento de Sancedo, Javier López, se encontró por sorpresa con la tala de los tres árboles, que considera forman parte del patrimonio natural del municipio y estima que su retirada del cementerio es «una atrocidad». «Es como si a alguien le diera por talar los cipreses famosos de Villafranca», significa. Los árboles, de entre 15 y 20 metros de alto (se cree que alguno de ellos podría tener dos siglos) fueron retirados del lugar con la ayuda de dos máquinas y según los datos que pudo recabar este periódico, uno de los motivos de la tala fueron las quejas porque los árboles «ensuciaban» algunas tumbas. Los árboles, según el técnico ambiental que promociona la naturaleza en el municipio que dirige Marcos Álvarez, estaban sanos y no ofrecían peligro.