LO IMPOSIBLE FUE REAL
Una vaca de Cuevas del Sil trae en un parto sin complicaciones 3 terneros
El dueño de esta ganadería es el veterinario Roberto Rodríguez, que lo ve como una rareza
Los terneros trillizos en el establo donde nacieron de una vaca que se llama Limonera. DL
Un parto gemelar en una vaca no es muy habitual, pero mucho más difícil es que la vaca traiga trillizos. Eso se considera por veterinarios y ganaderos como, casi imposible. Pero los imposibles se hacen realidad en algunas ocasiones, como fue en este caso el de la res Limonera, que trajo a este mundo a tres crías, dos hembras y un macho.
El parto fue en las instalaciones de un ganadero de la localidad de Cuevas del Sil, en el municipio de Palacios del Sil, integrado en el Consejo Comarcal del Bierzo.
Esta vaca, cuyo propietario es Roberto Rodríguez, conocido en la zona por su profesión como veterinario, se ha visto sorprendido por el feliz acontecimiento, y es que según explicó se trata de una «vaca pequeña» y que durante el embarazo no mostraba señales de alojar en su vientre a tres animales «pensaba que venía una por las características que presentaba la madre». Una vaca que no es primeriza, ya que esta vez se trataría del cuarto parto «pero siempre le vinieron de uno en uno», explicaba Roberto.
Cuando llegó el momento del parto, Roberto Rodríguez ayudó a Limonera a traer a la primera cría al mundo, y después comprobó por si pudiera alojar alguno más. «Siempre miro por si acaso», comentó el veterinario.
Lo imposible fue real
Que una vaca traiga gemelos es difícil, pero con trillizos se aproximaba a lo imposible
En ese momento detectó un segundo animal y poco tiempo después ya había nacido. Y una vez que nace el segundo, Roberto da por supuesto que no existen más animales dentro.
Pero si equivocaba, porque faltaba uno más. «Veo que la vaca sigue inquieta», relató. Por lo que se dispuso a volver a revisar el estado del animal, detectando un tercer ternero, que nace poco después sin mayores problemas en este parto.
Un parto de trillizos, que según explicó el propietario y veterinario Roberto Rodríguez se encuentran tanto las crías como la madre en buenas condiciones. «Están muy espabilados y sanos», puesto de manifiesto su dueño. A partir de ahora Roberto Rodríguez tendrá que ayudar a esta vaca con la alimentación de sus crías.