El presupuesto de los regantes del Bierzo Alto será de casi 625.000 euros
El actual nivel del pantano de Bárcena garantiza los riegos a partir del mes de abril
La Asamblea de Regantes del Canal Bajo del Bierzo aprobó este domingo la renovación de cargos y las cuentas del próximo ejercicio. Al no presentarse nuevos comuneros a la dirección de la entidad, seguirá como presidente dos años más Gerardo Fernández Fernández. Como vicepresidente continuará Álvaro Alba González.
En la reunión, también hubo elección de vocales titulares y suplentes de la junta de gobierno y jurado de riesgos, que les corresponde cesar por renovación reglamentaria. En este caso para un mandato de cuatro años.
También se aprobó el presupuesto para 2024, con unos ingresos 626.485 euros y unos gastos por la misma cantidad.
En el capítulo de Informes de la Presidencia, Gerardo Fernández comunicó que la Confederación Hidrográfica Miño-Sil está llevando a cabo el desembalse de agua por seguridad. En este momento, el pantano de Bárcena está al 60% de capacidad de agua y se espera en abril que pase del 80%, por lo que el consumo de agua para el riego está garantizado.
El presidente de los regantes, por otro, explicó que la Comunidad sigue con las alegaciones a las plantas fotovoltáicas que se quieren implantar en su área de influencia. Fernández justificó su oposición para defender los intereses generales de la Comunidad.
Otro tema que se trató en la asamblea, a la que acudieron medio centenar de comuneros, fue la situación de los morosos mientras «hay gente que está pagando, lo que es positivo para no subir las cuotas de riego, que se lleva cuatro años sin incremento», señaló también Gerardo Fernández.
La Comunidad del Canal Alto del Bierzo está compuesta por 3.200 comuneros y los que riegan sus parcelas pagan 290 euros por hectárea.
Las fincas que están apuntadas a la Comunidad y no riegan, pagan 155 euros por hectárea, por amortización de obras, canon y tarifas de la Confederación.
En ruegos y preguntas, de las pocas intervenciones que se hicieron, fueron para pedir el arreglo de las acequias de riego y problemas con el agua en fincas, algunas de ellas inundadas. También se preguntó cómo iba la recaudación de cuotas pendientes ya que, según algún comunero expresó, no ven bien que unos paguen y otros no.