Colmenas de Cacabelos para repoblar España con 47 millones de abejas ibéricas

Una abeja por cada español es el objetivo que ha reunido en torno a un colmenar de Cacabelos a una multinacional dedicada a la comercialización de electrodomésticos con un departamento de sostenibilidad que busca actuar contra el cambio climático, a una asociación de apicultores berciana, y a una empresa artesana que comercializa mil de castaño y brezo, de bosque, de flores y de catueso. Una abeja ibérica ( Apis mellifera) por cada una de las más de 47 millones personas que habitan en España. Y el proyecto apadrinado por la empresa LG que ahora desembarca en el Bierzo ya lleva un año trabajando en otras localizaciones de la geografía española (Málaga, Barcelona, Guadalajara o Valencia) para recuperar la especie autóctona y mejorar la biodiversidad de los lugares donde se ubican las colmenas.

Asediada por el cambio climático, por el avispón asiático, por la presencia de hongos en ambientes húmedos y condicionada comercialmente porque se trata de una especie que produce menos miel, aunque poliniza más (lo que favorece la biodiversidad de los ecosistemas), la abeja ibérica ha experimentado un importante retroceso en los últimos años, según explica la coordinadora del proyecto Smart Green Bees de LG, Iris Marcos. Por eso la idea es lograr que por cada habitante de España haya una abeja ejerciendo su labor reparadora en la naturaleza.

«Hemos comprobado que donde se recupera la abeja ibérica hay más biodiversidad, la flora y la vegetación y otro tipo de fauna es más rica», asegura Marcos, un día antes de que los responsables del proyecto, en colaboración con la asociación El Rincón de la Abeja y la empresa artesana Miel Camino de Santiago, comiencen a monitorizar el colmenar de Cacabelos como ya han hecho en otros centros de producción de miel del país.

Hasta el momento, el proyecto Smart Green Bees suma cuatro millones de abejas en toda España. Y con las de Cacabelos, añadirá otras 600.000. Triplicar esa cifra en un año hasta llegar a 1,8 millones de abejas ibéricas en el centro del Camino de Santiago en el Bierzo es la meta que se han marcado en LG.

La jornada de este miércoles servirá para instalar los sistemas de monitorización que miden la entrada y la salida de las abejas de las colmenas. Y una vez realizada una extrapolación sobre su número, se procederá a la expansión de los enjambres. La idea es que de cada colmena con su abeja reina puedan salir tres. «O recoges la miel o expandes los enjambres», cuenta Marcos.

Las abejas ibéricas, cuentan en el proyecto Smart Green Bees, «son las únicas capaces de polinizar el cien por cien de las especies de flora de todo nuestro país, generando el soporte necesario para la reforestación de árboles, arbustos y herbáceas». Después de las buenas experiencias en otros lugares de España donde se ha monitorizado el comportamiento y la demografía de las abejas en diferentes entornos, el siguiente paso es lograr que una de las paradas del Camino de Santiago en el Bierzo «vuelva a contar con un alto valor floral gracias al mantenimiento y conservación de la polinización autóctona». La repoblación, eso sí, topará en el Bierzo con un enemigo invasor como el avispón asiático, un depredador que ya ha diezmado el número de abejas y, por tanto, toda una amenaza para la biodiversidad.