MESA UN BIERZO CON MARCA PROPIA
El sector agroalimentario aguarda a la modernización del regadío para hacer más atractivo el campo a los jóvenes
Convertir el turismo en una experiencia de calidad obligará a una mayor colaboración entre lo público y lo privado
El Bierzo tiene campo y tiene capacidad para convertir al sector agroalimentario y el turismo en verdaderos pilares económicos, pero todavía hace falta un cambio de mentalidad y abordar los proyectos de forma conjunta entre lo público y lo privado, entre distintos segmentos de la economía. Son las conclusiones de la mesa redonda sobre 'El Bierzo como marca propia" que reunió en el Museo de la Radio de Ponferrada a Pablo Linares, director gerente de Alimentos de Calidad, el alcalde de Carracedelo, Raúl Valcarce, el responsable de Guías del Bierzo, José María Vázquez y bodeguero de Vinos de Arganza, Víctor Robla.
"En el Bierzo todavía no nos hemos dado cuenta de que el sector agroalimentario es un sector económico", ha afirmado el director general de Alimentos de Calidad del Bierzo, Pablo Linares, en busca de una explicación sobre por qué la agroalimentación no se ha convertido en un pilar real para la economía berciana. "Estamos anclados en que es una segunda actividad, el campo y la transformación del producto era un añadido a la economía familiar.. No hemos cambiado ese chip", aseguró.
Linares se mostró esperanzado en la modernización del regadío y "que podamos ofrecerles algo mucho más atractivo a los jóvenes", porque el Bierzo ya ha bajado de las 120.000 personas.
"No va a haber ningún sector que cubra el hueco que dejó la minería", concluyó, pero "el sector agroalimentario está llamado a ser un pilar fundamental. Habrá más sectores y tiene que haber más. Nunca es bueno poner todos los huevos en la misma cesta".
El alcalde de Carracedelo y empresario agroalimentario, Raúl Valcarce, coincidió en que el Bierzo "lo tiene todo" para que el sector agroalimentario explote. Es el momento de "lanzarse" , dijo después de recalcar que en su municipio han estado "próximos al territorio" con el impulso a la concentración parcelaria. Y lo tiene todo el Bierzo, aseguró, porque las figuras de calidad "han fructificado". "De la siete figuras de calidad seis están en nuestro municipio", añadió, satisfecho y convencido de que "con las figuras de calidad lo hicimos a la perfección".
¿Y qué le falta al sector agroalimentario, entonces? "Falta el empujón final. Hacer atractivo el sector", afirmó.
Y como Linares, coincidió en que la modernización del regadío puede ser ese elemento que haga más atractiva a la agricultura, pero el campo berciano lleva años esperando por ella. "Lo que hay que decir alto y claro es que nadie se ha sentado con los regantes para decirles cuánto tienen que pagar para modernizar el regadío", afirmó, convencido de que el comportamiento de los regantes del Canal Bajo "ha sido exquisito"
Se preguntó entonces "¿qué se está escondiendo detrás de esta maraña?". El coste que tendrán que asumir los regantes teniendo en cuenta que la Junta aportará el 30 por ciento del presupuesto (12 millones de euros). Los 33 millones restantes "seguramente lo tendrán que pagar el cien por cien a 25 o30 años (los regantes). No se han puesto sobre la mesa esas verdades", lamentó.
Dado ese paso, los fruticultores de la comarca y los que se dedican a la horticultura "van a ser más competitivos", auguró. "Tenemos clima, tenemos agua y tenemos suelo. Tenemos los tres vectores que dominan la producción. El siguiente paso es ver cómo hacemos que las generaciones jóvenes se enganchen a ese proceso. Es el momento de lanzarse. Lo tenemos todo, las figuras de calidad, el tejido...", animó Valcarce.
Pero entiende el alcalde de Carracedelo, que mostró su defensa del paisaje como "elemento vertebrador del territorio", que "algo estaremos haciendo mal" cuando en plena recolección no hay gente para recoger la manzana o la pera. "¿No estaremos haciendo una sociedad demasiado subvencionada o protegida con esos 450 euros? Por supuesto. ¿Nadie puede quedarse atrás, pero ese que está atrás, está haciendo algo de verdad para salir?" se preguntó.
Valcarce entiende que "no todo el mundo tiene que ser universitario" y hacen falta otros oficios para ordenar un territorio. "Hemos generado riadas de abogados, ingenieros, y no podíamos absorber esa mano de obra. Hoy un albañil cualificado tiene el sueldo de un médico o más. No va a haber quien haga una obra. Un electricista, un albañil va a ser una especie en extinción", afirmó, convencido de que "la única forma" de ordenar así un territorio será a través de la educación y de que en cada pueblo tiene que haber "un proyecto de desarrollo".
El bodeguero Víctor Robla, de Vinos de Arganza, apostó por estimular el elemento diferencial de la viticultura berciana en un país donde "tenemos 143 figuras de calidad en España". "O nos especializamos y ponemos en valor nuestra cultura y nuestros vinos o es muy difícil de competir fuera". Robla se mostró optimista. "Lo que tiene nuestro sector es que cada añada es diferente y en cada añada hay que ir explicando la evolución de los vinos. Es bueno que vengan a vernos y salir a explicarnos fuera. Es un trabajo cansino, pero importante." Y apostó porque cada bodeguero "aporte su granito de arena" en materia de sostenibilidad.
"Nuestro vino funciona. Hay muchas variedades uva en España, pero como las nuestras, muy poco", afirmó Robla, que ve en su sector "un futuro muy esperanzador" porque el mercado pide más. "Hay que animar a los viticultores que inviertan más en la tierra". "Hemos recogido un millón y medio de kilos en la zona y el mercado pide más".
José María Vázquez, de Guías del Bierzo, insistió en que el Bierzo tiene que verse como una experiencia conjunta para atraer al turista, aunque no haya un AVE que nos traiga un turismo masivo. "El Bierzo es la excelencia. No vienes a conocer un sitio, vienes a vivir una experiencia. Tenemos que desarrollar esas experiencias de una manera cooperativa. Una sola empresa no va a poder desarrollar todas esas experiencias comunes", desde la gastronomía al vino, afirmó, convencido de que el turista puede acabar siendo "nuestro mejor prescriptor".
Eso choca con la realidad de un sector turístico donde falta de todo. Y puso como ejemplo el eterno caso de Las Médulas. "A un turista le cuesta llegar a Las Médulas", afirmó. Y después tiene dificultades incluso para comprar "una triste botella de agua". Por eso apostó por "no focalizarnos en un solo tejido. La unión va a ser lo que nos va a generar riqueza a todos, acompañados por un sector como el turístico". Y lamentó que en el Bierzo hayamos vivido "de espaldas al sector turístico". Por Ponferrada pasa el Camino de Santiago y ni siquiera hay un albergue municipal.
También es optimista Vázquez. "El turismo es un reclamo para el Bierzo" dijo. Y advirtió de que "la pandemia ha transformado el concepto de turismo de masas" y aunque no haya AVE en el Bierzo, se puede vender "calidad y exclusividad" si los distintos sectores trabajan juntos. "Estamos en un punto en el que los bercianos tenemos que unirnos. No podemos hacer la guerra cada uno por su parte", afirmó antes de pedir que las administraciones escuchen al sector privado. "Hay que sentarse a trabajar de manera conjunta lo público y lo privado", animó.
"Por mucho AVE que no tengamos", concluyó "hoy en día la gente está buscando unos remansos de paz en conexión con el campo y la montaña" y en el Bierzo "tenemos el paraíso y no nos estamos dando cuenta".