A la Policía no le constaba Raquel Díaz como de riesgo de violencia machista
El intendente defiende la actuación de los agentes tras una llamada al 112 dos años antes
El intendente de la Policía Municipal de Ponferrada, Arturo Pereira, ha defendido este miércoles la actuación del cuerpo en el caso de la abogada Raquel Díaz, que denunció que su exmarido la arrojó por la ventana en mayo de 2020 en la casa que compartían en Toreno, y ha precisado que no constaba como de posible riesgo de violencia machista.
Durante su declaración en la tercera sesión del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de León contra el exmarido y supuesto agresor, el exconcejal de Ponferrada Pedro Muñoz, de 66 años, Pereira ha insistido en que tras la llamada que hizo la mujer dos años antes del suceso al 112 para pedir ayuda se estableció el protocolo previsto y no se consideró que pudiera tratarse de un caso de violencia machista.
Por su parte, el abogado de Raquel Díaz ha planteado que no se había auxiliado a la víctima puesto que llamó al 112 y los técnicos que recogieron esa llamada, que también han declarado en el juicio, aseguraron que no pudieron localizarla ni marcar la incidencia más que como «sin identificar», informa Efe.
Por otro lado, una vecina de la vivienda que Pedro Muñoz tiene en la pedanía ponferradina de Santo Tomás de las Ollas Pedro le situó en ese lugar la misma noche en la que, en una finca próxima a la localidad de Toreno, se produjeron los hechos que han llevado al expolítico berciano a ser juzgado en la Audiencia Provincial de León. La mujer declaró que ese 27 de mayo de 2020 —miércoles— le vio salir «sobre las nueve menos cuarto o menos veinte y me llamó la atención y se lo comenté a mi marido. Ese lunes habíamos estado con Raquel en el portal; el salía del garaje y pensé que volverían a vivir aquí otra vez. Salía deprisa con el coche, como que marchaba a algún sitio. No le di mayor importancia» dijo.
Añadió que no supo nada de lo ocurrido hasta el sábado y que cuando subió al tendedero una noche posterior le suscitó curiosidad ver que había tendidos «un pantalón y una camisa. Si no vive aquí, ¿Qué hace tendida la ropa?», reflexionó. También relató que otra noche, entre las 12 y la una, vio cómo una chica de melena y pelo largo negro sacó «muchísimas bolsas» de ese domicilio, que fueron introducidas en una furgoneta, informa Ical.
En la tercera sesión del juicio contra Pedro Muñoz también prestaron declaración sus hijos y su exmujer, quien dijo no haber sufrido maltrato psicológico ni amenazas por parte del acusado.