TRIBUNALES
Juicio a Pedro Muñoz: "Me tiró por la terraza y reboté contra el pozo", aseguró a las forenses la víctima
Las peritos reconocen a preguntas del magistrado ponente que los recuerdos de la víctima podrían estar alterados a causa de su situación psicológica posterior a los hechos
El juicio por el presunto intento de homicidio de Pedro Muñoz a su esposa Raquel Díaz llega esta mañana a la última sesión de la semana.
Se trata de una jornada de corte técnico en la que los citados a declarar exponen las conclusiones de sus informes. Muñoz, exconcejal de Ponferrada y exdiputado provincial, se enfrenta a 18 años de prisión acusado de tratar de acabar con la vida de su compañera.
13.18
La sesión se da por concluida. El ponente ofrece la posibilidad de que las partes modifiquen sus conclusiones provisionales pero los letrados y el Ministerio Fiscal emplazan al jueves 21 de diciembre para hacerlo.
13.01
La última perito de la sesión comparece en la sala. Es una psicóloga propuesta por la víctima. Alega que su relato de lo ocurrido tras los golpes puede estar afectado por la situación de coma. "Ella quería suplir con su imaginación cosas que a lo mejor no recuerda". Los resultados pueden estar afectados por la atención.
12.27
Vuelve la actividad. Un perito de la defensa sostiene que es lógico que hubiera restos biológicos del acusado en las extremidades de la víctima. Cree que es perfectamente posible que la mujer cayera de forma accidental y se golpease en "múltiples estructuras" existentes en la casa. "No es posible que la víctima fuera agarrada por el cuello y saliera desplazada cuatro metros. Para elevarla por encima de la barandilla tendrían que haber quedado marcas".
Hay un cruce ácido de preguntas y respuestas entre el perito de la defensa y el abogado de Raquel Diez. El letrado trata de argumentar las lagunas de su informe y el profesional defiende su trabajo y la forma en la que está hecho.
Las catorce lesiones que presentaba el cuerpo "pueden estar justificadas por mil hipótesis", señala el perito. "No es posible que Pedro Muñoz lanzara un cuerpo de 50 kilos a cuatro metros. Eso no lo hace ni el Increíble Hulk".
11.21
Suspendida la sesión hasta las 12.20 por ajustes en las comparecencias de los peritos.
11.14
Interviene a continuación un cuarteto de facultativos del Servicio de Biología por videoconferencia, Exponen que la convivencia de la pareja podría haber transmitido los restos biológicos aparecidos en la inspección. "Las uñas son propicias a la acumulación de material genético, se necesita un contacto más íntimo".
11.08
Dos guardias civiles analizaron muestras de sangre en una mesita de la vivienda de la pareja.
10.49
De nuevo en videoconferencia desde Valencia, asiste al juicio un psicólogo que evaluó la situación mental de Raquel. "Tenía estrés postraumático aunque su discurso estaba mediatizado por su estado de ánimo". Es un "síndrome de desinhibición frontal, con sentimientos exaltados en algunos casos aunque no era determinante. Pueden ser personas irritables pero no se puede realizar una predicción de cómo va a evolucionar".
10.21
Ya en turno presencial, intervienen dos peritos que realizaron informes en mayo de 2020 tras visitar a la víctima en el centro hospitalario. Aprecian lesiones internas y externas. "No eran compatibles con una caída desde poca altura". Había lesiones "provocadas por agentes externos, como un golpeo". Tenía pocas lesiones de defensa, circunstancia que sostiene la tesis de que apenas pudo presentar resistencia.
"No todas las lesiones pueden haber sido producidas por la caída, tiene que haber agresiones posteriores o anteriores porque los mecanismos son diferentes", explicaron las forenses que aseguraron que la caída de un objeto inanimado que se usó para la reconstrucción de los hechos "no recoge fielmente lo ocurrido, no es lo mismo. Nos ayuda pero un cuerpo vivo no es lo mismo que un objeto".
Había lesiones "en la región occipital, en las rodillas, en los tobillos, en el costado y en el abdomen. Eso no se hace con una sola caída, no pertenecen todas al mismo plano".
Introduce el ponente unan cuestión interesante: "¿Podría ser que el estado de consciencia de la víctima alterase la percepción de sus recuerdos antes y después de los hechos denunciados?", pregunta el magistrado. "Evidentemente, podría ser" responden las forenses.
10.16
Una psicóloga y una trabajadora social toman la palabra. Realizaron un informe psicosocial que determina la existencia de violencia física y psicológica: "Tenía relato de haber sufrido maltrato".
9.33
Arranca la sesión con dos forenses en videoconferencia. Comparecieron en el Hospital para evaluar la capacidad de la víctima para declarar en el Hospital de León. "Tenía miedo y estaba preocupada por sus familiares".
Ofreció "un discurso rico en detalles". Aseguró que todo ocurrió en la finca de Toreno: "Me tiró por la terraza, reboté en el pozo y me golpeé luego contra los escalones. Después me metió dentro del salón. En la tele estaban poniendo Operación Triunfo, eso sí lo recordaba. Me disparó con una pistola de munición plástica, me pegó un puñetazo en un ojo, me dijo que matarme era poco y me pegó patadas".
Cuando estaba sentada en el sofá "me pegó con un palo, pero ya no veía nada, solo sentía",, aseguran las forenses que declaró la víctima: "Las lesiones concuerdan perfectamente con esta versión".
Aparecieron pelos de la mujer en el pozo "que se cotejaron con los de sus familiares por si hubiese que acotar la búsqueda". Ennumeraron las forenses el nutrido grupo de lesiones que se apreciaron en el cuerpo de la víctima: "No es necesario que tuviera marcas en el cuello para que fuera agarrada por el cuello".
Pedro Quintana, abogado de la defensa, trata de incidir en posibles incongruencias entre el informe forense y la versión de la herida: "No había sangre en zonas en las que deberían haber quedado restos biológicos". El ponente le advirtió para que no preguntase por informes de otros peritos. Sí reconocieron una cuestión: "Si el cuerpo hubiera sido arrastrado, tendrían que haber quedado marcas".