Villarino denuncia la apertura de pistas forestales sin autorización en zona osera
La Junta Vecinal explica que se han realizado en monte comunal, que nadie pidió permiso y que este hecho puede ser constitutivo de un delito contra el medio ambiente
La Junta Vecinal de Villarino del Sil —localidad perteneciente al municipio de Palacios del Sil— ha interpuesto una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil de Villablino por la apertura de pistas forestales en montes pertenecientes a esta pedanía, por tanto de titularidad pública, sin haber solicitado permiso. Según figura en el escrito de denuncia presentado por el secretario de esta Entidad Local Menor, los hechos tuvieron lugar a principios del pasado mes de marzo, cuando una máquina accedió a esos montes, abrió pistas y realizó trabajos en un poste eléctrico. Una intervención no habría sido comunicada al pueblo, incluido además en zona puramente osera, en el Alto Sil.
Precisamente, el hecho de ser hábitat del oso pardo es una de las circunstancias subrayadas en la denuncia ante la Guardia Civil. Son montes de protección especial para favorecer a la especie y a otras de gran valor que habitan en la zona. Los ganaderos, por ejemplo, están sometidos a un rígido control para poder abrir caminos de acceso a pastos y desbrozar en este municipio, teniendo que hacerlo siempre con las pertinentes autorizaciones por parte de la Administración. En este caso y según la denuncia, nadie pidió permiso para abrir una pista de acceso a instalaciones eléctricas.
Además de poner el hecho en conocimiento de la Guardia Civil de Villablino, la Junta Vecinal de Villarino del Sil también ha avisado a la Fundación Oso Pardo, al Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León y a la Fundación Patrimonio Natural. Los representantes de esta pedanía berciana creen que la acción denunciada puede ser constitutiva de un delito de daños al medio ambiente, al no contar con proyecto ni evaluación de impacto medioambiental. Por eso, piden que se investigue, ya que, de momento, desconocen quién puede estar detrás de esta intervención y de la apertura de estas pistas.
Villarino del Sil ha estado en el foco mediático durante mucho tiempo precisamente por la coexistencia de sus vecinos con el oso pardo, para ser exactos por la presencia de una osa que fue bautizada como Lechuguina, porque se acostumbró a adentrarse a diario en el pueblo para comer lo que encontraba en las huertas y en los árboles frutales, y ello generó alarma.