El Hospital El Bierzo inicia un estudio para atajar la reincidencia en pacientes suicidas
El objetivo de Psiquiatría es determinar que intervención es mejor o peor según cada perfil
Parte del equipo de Psiquiatría del Hospital El Bierzo.
Atajar las conductas suicidas en pacientes de riesgo alto identificado es uno de los retos prioritarios para el Servicio de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital El Bierzo, que constata un incremento de tentativas autolíticas y un número mayor de hospitalizaciones por esta causa. Hasta setenta al año, según los últimos datos registrados. En la estrategia activa para conseguir ese objetivo, tiene gran peso el programa de prevención de suicidio BI-S (Bierzo-Suicidio) que, ya en 2017, supuso la apertura de una consulta monográfica en la que trabaja un grupo multidisciplinar (psiquiatras, psicólogos, personal de enfermería, trabajadores sociales y médicos de Atención Primaria y Urgencias) encargado de identificar los casos de riesgo y ofrecer una atención adecuada e integral para prevenir intentos de suicidio y la mortalidad por esta causa.
Tratamientos cada vez más personales
Ahora, el Servicio de Psiquiatría y Salud Mental da un paso más en esa estrategia con el desarrollo de un proyecto de investigación en el que evaluará la efectividad de este programa para la prevención secundaria de la conducta suicida en población atendida en Urgencias. «El proyecto se basa, fundamentalmente, en evaluar la eficacia del programa y analizar los cambios que se producen en los pacientes que se atienden en el mismo y qué factores predicen la mejoría», explicó el psiquiatra del Hospital El Bierzo José María Pelayo.
Por un lado, se compara el riesgo de repetición de conductas suicidas en pacientes que ya han sido atendidos en el BI-S con aquellos que han sido vistos en Urgencias por intentos autolíticos y que todavía no han sido derivados al programa o lo fueron pero decidieron no acudir. Por otro lado, se realiza una batería de test y escalas para evaluar a los pacientes que se atienden dentro del programa de prevención, incluyendo aquellas que miden síntomas depresivos, de ansiedad, impulsividad, antecedentes de acontecimientos traumáticos, calidad de vida y también parámetros analíticos relacionados con la salud física y con estados de inflamación que se han vinculado a la depresión y al riesgo de conducta suicida.
«Durante seis meses, se repetirán las evaluaciones para analizar la capacidad del programa para mejorar estas dimensiones sintomáticas y de calidad de vida y también para estudiar qué factores predicen mejor la respuesta dentro del programa. Es decir, nos permitirá saber cuánto de bien o mal funciona el BI-S y en qué aspectos debe mejorar o en qué buscar alternativas», explicó Pelayo, que aseguró que también favorecerá la elaboración de perfiles de pacientes en los que las distintas intervenciones van mejor o peor. Con ello se avanzará hacia la personalización del tratamiento.
La investigadora principal de este estudio de evaluación de la eficacia del programa de prevención del suicidio del Área de Salud del Bierzo es la psiquiatra Raquel Martín; pero también participan en el proyecto José María Pelayo, la psiquiatra infanto juvenil Flora Vega, la psicóloga clínica Cristina Montero, la enfermera Elizabet López, la bioquímica clínica Tania Viñambres y la MIR Sara Vega. Todos ellos del Servicio de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital El Bierzo; pero también están implicadas las profesoras de la Universidad de León Tania Fernández y Alba Marcos y el psiquiatra del Hospital Marqués de Valdecilla Marcos Gómez.
Consulta preventiva
Este proyecto de investigación dirigido a la prevención del suicidio es uno de los cuatro que han sido autorizados en el Hospital El Bierzo este año, con financiación de la Gerencia Regional de Salud. Hay otros también del Servicio de Psiquiatría y Salud Mental y un cuarto de Nefrología.
Prácticamente, uno de cada diez pacientes consultados en el Hospital El Bierzo lo es por un problema psiquiátrico o de salud mental. La prevalencia de las enfermedades o trastornos de este tipo es cada vez mayor y, en ese conjunto, las tentativas de suicidio crecen por encima de la media. De ahí que entre los propósitos del área de Salud Mental del Hospital El Bierzo esté el de crear un programa específico dedicado a ello en el Hospital de Día de Psiquiatría puesto en marcha a finales del pasado año. Un servicio que complementaria el programa ambulatorio actual, que incluye consultas uno o dos días a la semana.