Los desprendimientos no cesan en la CL-631 y la Junta revaluará la situación

Los cascotes no han dejado de caer sobre la carretera CL-631 en Páramo del Sil pese al gran derrumbe producido en la mañana del miércoles. El talud sigue escupiendo piedras sobre la calzada y algunas han alcanzado la antigua vía del tren (Ponfeblino). Es pronto para hacer una valoración, sobre todo porque la zona está totalmente acotada por razones obvias de seguridad, pero la alcaldesa de Páramo, Alicia García, ya avanza que se evaluará la situación en cuanto sea posible y si hubiera daños en la infraestructura ferroviaria, se «reclamará que sean subsanados» junto con la carretera.

La regidora también ha explicado que está previsto que técnicos del Servicio Territorial de Movilidad de la Junta de Castilla y León regresen a la zona a principios de la próxima semana para revaluar el estado del talud. «Tendrán que hacer un informe más detallado porque han visto que está peor de lo que creían», afirmó García. Las enormes grietas en la roca son perfectamente visibles desde abajo y esas grandes secciones de piedra amenazan con desprenderse y caer también a la calzada. «El proceso no va a ser rápido», pronostica. De momento, el Ayuntamiento ya ha desbrozado y limpiado la carretera que se ha habilitado como desvío, la que comunica con Sorbeda desde Santa Cruz del Sil y también desde Hospital.

Desde que se cortó la CL-631 y el tráfico fue desviado por esa vía, los vecinos de Sorbeda se han tenido que enfrentar a situaciones complicadas por la gran afluencia de vehículos, cuyo conductores desconocen, en muchos casos, el trazado de la carrera y como seguir hasta retomar la CL-631. Así lo ha explicado también la alcaldesa de Páramo del Sil, resaltando algunas deficiencias en la señalización colocada para advertir de los desvíos. «Se están dado situaciones en las que algunos coches llegan, incluso, hasta el mismo corte».

También el servicio de transporte de viajeros que comunica Ponferrada con Villablino y viceversa se ha visto afectado y, como tal, ha habido que modificar los horarios en cada una de las paradas para adaptarlos a la nueva realidad de la carretera mientras no se pueda reabrir al tráfico.

La máquina retroexcavadora que ha abierto camino por la parte alta de la montaña sigue con su propósito de sanear la parte más alta del talud, pero toda la estructura de la ladera está muy afectada.

También el PP de Páramo del Sil se pronunció ayer respecto al estado de la montaña que ha cortado por completo la carretera Ponferrada-Villablino. Apunta a que la construcción de un talud de contención en ese punto, entre los kilómetros 33 y 34, es la opción que se valora. Una malla no parece suficiente a tenor del estado general de la ladera. «Si bien somos conscientes de la complejidad de las labores a llevar a cabo, confiamos en que se dé una solución definitiva a este serio problema a la mayor brevedad», afirmaron desde el PP local.

N o hay que pasar por alto que, al ser la comunicación de El Bierzo con Laciana y Asturias, la CL-631 es una carretera que soporta un volumen muy importante de tráfico diario.