MEMORIA HISTÓRICA
Localizan al berciano represaliado en Jaca y la familia lo enterrará en Horta
La ARMH encuentra en el cementerio oscense los restos de Jesús Guerrero García, fusilado al intentar pasarse al ejército republicano
Jesús Guerrero García reposará en el cementerio de su pueblo setenta y seis años después de que lo fusilarán en Jaca. Será en una sepultura de Horta, en el municipio de Corullón, donde la familia del soldado de reemplazo de 22 años, asesinado en enero de 1938, quiere darle un enterramiento digno, una vez que sus restos —a la espera de que se confirme su identidad con una prueba de ADN y un estudio antropológico— hayan aparecido en el lugar donde se esperaba que estuvieran: una fosa común en el fondo del cementerio de Jaca.
Así lo ha confirmado la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), que este miércoles comenzaba en el camposanto de la localidad oscense los trabajos para exhumar los restos del berciano y los de un vecino de Biescas, Fausto Lalaguna, también asesinado durante la Guerra Civil después de lo sacaran de su casa en la Casa Forestal de Panticosa.
Dos de las sobrino-nietas de Jesús Guerrero se han desplazado hasta Jaca para asistir a la exhumación de su pariente. Y será el ADN que aporte otro sobrino el que servirá para confirmar en el laboratorio su identidad. La ARMH tiene previsto trasladar los restos a sus instalaciones en el campus de Ponferrada para llevar a cabo todas las pruebas, antes de entregarlos a las familia para darles sepultura en la localidad de Horta.
Según la información de la ARMH, Jesús Guerrero García pertenecía a la quinta de 1936 que fue obligada a alistarse en el ejército sublevado contra la República. Incorporado al Regimiento Zamora número 20, su intento de pasarse al Ejército Popular de la República junto a otros compañeros se saldó con su fusilamiento. Y su enterramiento en una fosa anónima.