Luz verde ambiental a la factoría de reciclaje de palas de Grineo en Cubillos del Sil

Buena parte de los proyectos industriales anunciados y llamados a paliar las consecuencias económicas del cierre precipitado de las minas de carbón en el Bierzo siguen a la espera de que se plasmen en realidades tangibles, con creación de empleo y generación de riqueza; Pero, poco a poco, empiezan a moverse papeles en la administración, fundamentales para que estas industrias se pongan en marcha.

Este viernes se supo que el proyecto industrial de la empresa Grineo Gestión Circular S.L. ha salvado el preceptivo trámite de impacto ambiental. La Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Medio Ambiente, daba luz verde y autorizaba a la empresa en este aspecto fundamental de cumplimiento de las medidas medioambientales a la hora de acometer el reciclado de palas eólicas que acabaron en los montes su ciclo de producción.

El director general de Infraestructuras y Sostenibilidad Ambiental de la Junta, José Manuel Jiménez Blázquez, firmaba la declaración favorable de impacto ambiental para la planta de reciclaje de palas eólicas en el término municipal de Cubillos del Sil. El proyecto evaluado consiste en la construcción de una instalación de procesamiento de dos tipos de residuos como materias primas: «palas de aerogeneradores troceadas y residuos de tejidos de fibra de vidrio procedentes de la fabricación de las palas de aerogeneradores y de otros procesos industriales».

La capacidad potencial de tratamiento es de 20.000 toneladas anuales de palas troceadas y de 5.000 toneladas anuales de residuos de fibra de vidrio, con una máxima de almacenamiento de 3.000 toneladas. «Por tanto, la actividad proyectada consistirá en el reciclado de residuos orgánicos no peligrosos para la producción de materiales o sustancias», indican desde la Junta en la declaración ambiental.

La cantidad de residuos que técnicamente se podrán gestionar en la instalación a ubicar en el macropolígono del Bayo (finalmente se descartó por operatividad los terrenos liberados de la central térmica de Compostilla) puede alcanzar la capacidad citada de 25.000 toneladas anuales. Serán 2.500 toneladas de residuos de materiales compuestos (tejidos impregnados, elastómeros o plastómeros), 2.500 toneladas de residuos de materiales de fibra de vidrio y 20.000 toneladas de plásticos.

Grineo es la empresa creada por la eléctrica Endesa y PreZero España encarhada de liderar la gestión de las palas eólicas al final de su vida útil y que se tratarán en la planta que se ubicará en Cubillos del Sil. La iniciativa que forma parte del Plan Futur-e de Endesa para la central térmica de Compostilla, actualmente en desmantelamiento.

Como se recordará, PreZero España y Endesa anunciaron la construcción de esta planta del Bierzo como la primera de reciclaje de palas eólicas de toda la Península Ibérica. Grineo esla sociedad creada para gestionar las palas que serán recicladas en la instalación proyectada por PreZero España y Endesa.

Según resaltan los promotores de esta iniciativa, «el objetivo de esta primera planta de la península es reciclar las palas eólicas en desuso y convertirlas en materia prima para nuevos productos, dando nueva vida útil a esos componentes».

La instalación donde se tratarán las palas gestionadas por Grineo cuenta, con el reconocimiento del Programa Marco Horizonte Europa, de la Unión Europea, principal programa de financiación de la UE en materia de investigación e innovación. «Este reconocimiento a un proyecto innovador que permitirá aplicar realmente el concepto de economía circular, reciclando los componentes para darles una segunda vida útil, se enmarca en el proyecto Blades2build, en el que participan 14 empresas y centros de investigación punteros de toda Europa», dicen desde Endesa y Grineo.

Con la aprobación este viernes del proyecto de impacto ambiental, la nueva planta de reciclaje de palas eólicas de Cubillos del Sil en el Bayo sigue de este modo su tramitación y dicen desde la compañía eléctrica que «se espera que inicie su construcción en 2024».

previsión inicial

La nueva planta en la que llegarán a trabajar en torno a 30 personas de forma fija, según los datos de Endesa, responde al reto del reciclaje de más de 2.000 unidades de palas eólicas al año, es decir, unas 6.000 toneladas anuales de composite de fibra de vidrio de los aerogeneradores, «apostando decididamente por la circularidad de los materiales de las palas». Las materias primas secundarias recuperadas podrán ser utilizadas, entre otras aplicaciones, en sectores como el de la automoción, la construcción o el cerámico, «creando de este modo una economía circular en el negocio eólico español», inciden desde la compañía eléctrica.

Esta planta que se localizará en Cubillos del Sil forma parte del Plan Futur-e de Endesa para la central térmica de Compostilla, que actualmente está en un procedo muy avanzado de desmantelamiento. «En este sentido, el objetivo de Endesa es desarrollar proyectos en las zonas de transición justa que tengan duración en el tiempo, como ya lo hizo en su día con las instalaciones de generación térmica, ahora quiere seguir vinculada al territorio con proyectos únicos como este», concluyen desde la misma compañía.